El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha desestimado el recurso de apelación del secretario del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, José Marcelino López Peraza, contra una sentencia de febrero de 2012 que también dio la razón al Consistorio sureño y que avaló una sanción disciplinaria que le fue impuesta en noviembre de 2005 por parte de la Secretaría de Estado de Cooperación Territorial.

Dos meses después, en diciembre de 2005, la entonces alcaldesa, Concepción Narváez, le destituyó del cargo de secretario municipal, una medida que mantuvo su sucesora, María del Pino Torres. López Peraza denunció al Ayuntamiento por vulneración de Derechos Fundamentales, y tras cumplir la sanción se reincorporó al puesto al principio de este mandato.

La nueva sentencia, emitida el pasado 18 de julio por la Sección Segunda de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJC, desestima el recurso de López Peraza y le impone las costas del proceso. El ponente, el magistrado Francisco Javier Varona, señala que el recurso de apelación es "un extenso y desordenado escrito, lleno de adjetivos y ayuno de sustantividad jurídica".

También considera "sorprendente" que el recurso de López Peraza se dirigiera contra el decreto de la Alcaldía de 2005, por el que "en cumplimiento" de aquella resolución ministerial sancionadora se materializó tal destitución. "Con lo expuesto -añade el ponente- queda de relieve el falso montaje sobre el que se construye el proceso. No se trata como veremos de si el Decreto objeto d e un recurso interpuesto con seis años de posterioridad, fue notificado formalmente o no y si debía serlo, sino de atribuir a tal acto la causa del cese, como si la sanción impuesta no existiera". En otro momento se apunta "la sinrazón" de la apelación.