La fiscal ha solicitado una multa de casi 7.000 euros para dos médicos a los que acusa de intrusismo profesional y falsificación por pasar consulta en una clínica privada de Santa Lucía sin la homologación del título por parte de uno de ellos.

Lo curioso del caso es que el supuesto fraude fue descubierto por un guardia civil tras acudir a la clínica a solicitar la baja por una indisposición, según declaró el agente durante el juicio, que se celebró el pasado lunes y martes en el Juzgado de lo Penal número de la capital grancanaria.

El policía, que fue a la consulta por la mañana, se quedó con la duda de si la persona que lo atendió era realmente un médico. Por eso volvió por la tarde y le reclamó la credencial. "No me toques los cojones que tengo mucho trabajo", asegura el agente que le respondió Ramón P. C., un facultativo cubano que en diciembre de 2008, cuando ocurrieron los hechos, todavía no tenía homologado el título de Medicina que había obtenido en el país caribeño.

El propio Ramón reconoció los hechos en el juicio. Admitió que llegó a emitir la baja, que usó el sello de otro médico para tramitar el parte y que en ese momento no estaba colegiado ni tenía la homologación del título. Sin embargo, en su descargo agregó que no trabajaba en la clínica, sino que iba a revisar libros y aprender. "Soy consciente de que he cometido un error garrafal, pero pensaba que era una ilegalidad administrativa y no un delito", declaró el médico, que ya tiene toda la documentación en regla.

Intrusismo

El fiscal acusa a Ramón P. C. de intrusismo y falsificación, en este caso en concepto de autor, delitos por los que relama una multa superior a los 3.400 euros. También señala como cooperador necesario al propietario de la clínica, Juan Manuel C. L., quien se enfrenta a la misma sanción que su colega. Este imputado negó que Ramón estuviera contratado o trabajase en su centro, pues su obligación era observar y coger experiencia para hacerle un contrato cuando arreglase los papeles.

El Colegio de Médicos también ejerció la acusación, pero sólo pidió una multa similar a la Fiscalía por el delito de intrusismo. Ni la fiscal ni el Colegio han reclamado la inhabilitación temporal de los médicos, mientras que las defensas piden la absolución.