Su ponencia ha cerrado en la Casa Condal un ciclo de intervenciones con el patrimonio histórico de Telde de fondo.

Me he dedicado a ofrecer una visión de la historia de la ciudad mediante el repaso del conjunto histórico-artístico que conforman los barrios de San Juan y de San Francisco y de los Bienes de Interés Cultural, los BIC, del municipio.

¿Hay muchos en Telde?

Son 11, aunque hay otros expedientes incoados y varios solicitados. Tras la modificación de la ley en 1985 existen distintos tipos. En general, es una declaración que le otorga mayor protección al bien, aunque en el caso de los yacimientos arqueológicos creo que también debería afectar al entorno.

¿Qué importancia tienen los barrios fundacionales?

San Juan y San Francisco conservan casi intactas sus tramas originales y en 1981 fueron declarados conjunto histórico-artístico. Se han potenciado normas urbanísticas, como el Plan de Reforma Interior, para preservarlos, y luego el Plan General ha influido en su evolución. Pero lo cierto es que se ha producido un deterioro arquitectónico y contamos con varias casonas a la venta abandonadas porque no pueden ser adaptadas al tipo de unidad familiar actual.

¿Qué medidas sugiere?

Creo que deberíamos plantear una serie de medidas para recuperar el conjunto en su totalidad. En los últimos años se ha intervenido dándoles uso público a varios inmuebles históricos, pero considero que no estaría de más potenciar una mayor conciencia social entre la ciudadanía para conservar este importante legado cultural.