Pequeños empresarios, autónomos, empleados y residentes de Tarajalillo acogieron ayer positivamente el proyecto del complejo Costa Afortunada, de la familia Del Castillo, que contaría con una inversión de 1.600 millones de euros en la costa de San Bartolomé de Tirajana. De llevarse a cabo, la iniciativa conllevará la creación de 9.000 empleos. Los consultados consideran que tal inversión puede atraer "más turistas de calidad y crear empleo". Por contra, campistas de Tarajalillo y residentes en Playa del Águila muestran su preocupación, pues el proyecto les puede desplazar o rebajar la calidad de vida de la zona.

El responsable del Gran Karting Club de Tarajalillo, Carmelo Castellano, manifestó que "si el proyecto Costa Afortunada sale adelante está muy bien, porque sufrimos una crisis enorme y muchos canarios están parados y necesitados de ese trabajo". "Es una gran inversión que activaría toda esta zona, que está un poco apagada, aunque gracias a nosotros y a otros inversores no está del todo muerta", apuntó.

Carmelo Castellano dijo que "el proyecto es positivo porque atraería más turistas e incluso nos beneficiaría a nosotros, porque esta zona adquiriría vida y dejaría de tener esa montaña seca, que llegó a estar plantada de tomates". "Ojalá se aproveche la inversión, porque los rusos y alemanes se podrían ir a Tenerife", advirtió.

El responsable del bar cafetería del karting, Cipriano Arteaga, valoró la iniciativa como "muy buena". "Me parece bastante bien todo lo que sea una inversión de cara al futuro y a crear empleo, así como dar a conocer más la Isla con nuevas ofertas de ocio para que sea un referente nacional y europeo", señaló. "Ayudaría a rebajar la alta tasa de desempleo que tiene la Isla, donde cada vez hay más dificultades en salir a buscar trabajo", añadió Arteaga.

Castellano y Arteaga se mostraron muy esperanzados con las nuevas inversiones en el complejo Costa Afortunada de Tarajalillo, ya que se unen al proyecto de paintball -juego de pintura- que está construyéndose también en la zona y el puerto deportivo que proyecta en Bahía Feliz el grupo Satocan, con un coste de 70 millones.

Los mecánicos Francisco Benítez y Daniel Suárez resaltan las ventajas del proyecto temático. "Supone un cambio para esta zona tan seca", dijo Benítez. "El plan ayuda a superar la crisis porque crea empleo y dará vida a la costa", añadió Suárez. En el mismo sentido se pronunció Antonio Suárez, pastor de 3.000 cabras: "El complejo transformaría Tarajalillo, porque el campo de golf, el lago y las zonas verdes reverdecerían esta zona, que fue de tomateros".

Igualmente, el responsable del chiringuito Bahía, Alejandro García, expresó que "si el nuevo proyecto sirve para atraer a más turistas y dar más puestos de trabajo ante esta situación, me parece perfecto; será beneficioso".

Sin embargo, a las campistas de Tarajalillo Noelia Montesdeoca, Marisol e Inma Corujo, les parece "fatal el proyecto, porque nos quitarán esta zona de acampada de caravanas, ya que apenas hay lugares para hacerlo y es muy costoso ir a hoteles o apartamentos". También mostraron sus reservas Mari Carmen Sosa y Ángeles Delgado, que consideran que "es más importante rehabilitar los hoteles y aprovechar todas las zonas existentes, que seguir ocupando espacios protegidos". A su juicio, la calma de Playa del Águila "se puede acabar".