¿Cómo le comunicaron su despido como presidente de Infecar?

Estaba enviando precisamente por fax al presidente nuevos descubrimientos sobre delitos de Juan Domínguez, cuando recibí casi simultáneamente un oficio. Por eso temo que pueda ahora destruir los documentos.

¿Esperaba esa decisión?

La verdad es que me lo esperaba, porque conozco al Sr. Bravo como si lo hubiese parido. Tiene el síndrome de Estocolmo, porque tiene secuestrado el voto y tiene una admiración por quien le secuestra. Ha encubierto la corrupción.

¿Sabía que Bravo declaró apenas una hora antes de comunicárselo que no había tomado una decisión, y que ésta se tomaría el viernes?

Les engañó.

¿Me podría decir algo más de las supuestas irregularidades que estaba mandando por fax cuando recibió el despido?

Fue durante el último congreso del Centro Canario Nacionalista (CCN) al que no acudí. Aunque declaró que sólo se cogió una estancia, lo cierto es que se ocuparon varias, y se pasó a Infecar la factura del ágape y de otros servicios. Y eso no lo pagó el partido, sino que se pasó a otros que hipotéticamente iban a alquilarlos. Y se le comunicó hasta en tres ocasiones.

¿Cuándo tiene previsto llevar la documentación a Anticorrupción?

Este es un tema que no puede llevar cualquier Fiscalía, pese a lo que ha hecho Bravo de Laguna, sino que debe llevarlo Anticorrupción. Ya he hablado con ellos y la presentaré mañana [por hoy]. Me siento orgulloso de que en mi último cargo haya salido por la puerta grande, cuando abunda tanto la corrupción, y yo me he jugado el puesto por combatirla. Me voy con la conciencia tranquila, perdiendo los 1.600 euros mensuales. Pero me iré a mi casa a seguir trabajando por Canarias.

¿En que se fundamentan sus acusaciones de falsedad documental y prevaricación que denunció en el pleno del Cabildo?

Juan Domínguez debió cogerle mucho gusto al cargo, que era accidental, porque lleva parte de medio cabildo y que, con mi experiencia, sería imposible, sobre todo limpiamente, que es lo que niego, porque los ha llevado corruptamente. Al menos uno de ellos. Nada más entrar me quejé de quien nombró por unos días y duró un año de gerente, y de que despachaba con él en su Consejería a espaldas mías, sin informarme de tales reuniones. Era una puenteo inadmisible. Se lo dije y me contestó, con una serenidad gélida, que si no me había enterado de por qué estaba en Infecar. Y me dijo: "Tú no estás en buena condición económica. Y he querido -cuando no fue una decisión suya- que te ganes unos euros y sin venir. Te ingresamos dinero en la cuenta y firmas en tu casa. Y en los actos vienes, para que me vean contigo porque eres una persona con gran currículo". Le dije que me estaba ofendiendo cuando dice que ponga la mano a fin de mes y no haga nada. Le dije, para probarlo, que me pensaría el dimitir. No me disuadió, sino que con sus ojos estaba deseoso, pero no dimití. Quería que ocultase lo ocurrido durante un año y pico. Seguí mi tarea, y me puse a investigar los actos, que eran muchísimos. Todavía sigo investigando los delitos, la prevaricación y falsedad. Y sigo descubriendo cosas. Y me quedan unos cuantos por descubrir. Ahora seguirá él. Y es como poner al zorro a cuidar las gallinas. Y destruirá los papeles. No me puedo fiar de quien he dicho que es un delincuente.

¿Cuántos deudores tiene Infecar?

Siete u ocho y uno de ellos mi propio partido. Él era secretario federal del CCN y siendo presidente accidental de Infecar organizó un congreso. Y producto de ello, sin saberlo el presidente, es deudor de 3.800 euros por un salón que ocupó. Pero no se facturó ni consta que ocupara varias más, el uso de las alfombras, las sillas, el escenario que es caro que hizo Infecar y que no ha cobrado, el ágape, la luz y sonido. Todo eso lo ha pagado Infecar, y quien tenía que pagarlo era CCN, pero como no informó... Se puso a empresas que estuvieron, pero se ha documentado que falsamente. Esto es otra falsedad y es otro delito de malversación.

¿Y qué dice sobre los resultados de la última auditoría?

Está muy bien hecha. Pero se me ocultó que existía. En ella se detectaron varias irregularidades. Entre ellas figura un cuñado suyo. Y es que se había acordado que no se sacara a concurso el servicio informático porque salía más barato contratarlo directo. En principio era hasta diciembre de 2011, pero también fue en 2012. Y esa persona siempre pasa la misma factura por 1.200 euros por varios conceptos. Es otra irregularidad.

¿Cómo ve el Cabildo?

El presidente tiene cierto temor porque necesita el voto de un tránsfuga, y que yo considero un delincuente. Pero tiene también a Hernández Lobo. A lo mejor es por el rifirrafe con Rosa Rodríguez, pero estoy absolutamente convencido de que no haría felonía al partido. No creo que haga nada contra el PP.

¿Algo más?

La última felonía del señor Domínguez, y me tiene que dar las gracias por llamarlo señor, es que en mi despacho me dijo que por favor pusiera mi teléfono encima de la mesa para que no grabase la conversación. Eso es ofensivo para una persona de 80 años de edad como yo, y para un político que lleva un año en el cargo a quien ha sido todo en la vida política. Armado de paciencia, y pisoteando mi dignidad, quité la pila y lo puse sobre la mesa, pero no le dije que hiciera lo mismo él. Y entonces me ofreció un cargo con más dinero, sin saber todavía sobre mis denuncias. Y, segundo, que debíamos negociar mi comparecencia. Si llego a negociarla soy tan delincuente como él. Me iré al otro barrio pero lo haré con dignidad.