Unos 60 bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria han realizado este miércoles una masiva donación de sangre en el centro de la capital, como "solidaria protesta" para evitar que los políticos "sigan desangrando con su gestión incoherente" este servicio insular.

El presidente de la junta de personal y miembro del comité de huelga del Consorcio, Efraín Martel, ha dicho a Efe que con el paso de los días la situación de su colectivo es "menos sostenible", sobre todo tras tener conocimiento de que el Gobierno canario no seguirá sufragando su parte en el presupuesto a partir de 2014.

"Los bomberos somos un colectivo consciente de las necesidades de la sociedad y, con esta movilización, nos hacemos partícipes de ellas. Somos un colectivo solidario y le pedimos a los ciudadanos que también vengan a donar sangre antes de que los políticos nos la quiten por otra vía", ha subrayado Martel, ante la unidad móvil de la calle Triana donde han realizado esta protesta.

El portavoz del comité de huelga ha calificado como "abultados" los recortes producidos por todas las administraciones y ha recordado que el Consorcio de Emergencias de Gran Canaria ya ha rebajado su presupuesto.

En su opinión, las emergencias tienen un costo y, si no se es consciente de esa realidad, se estaría dando un servicio "en precario, al igual que se hace en otros ámbitos, como el sanitario, la seguridad o la educación".

Efraín Martel ha informado de que unas 200 personas -bomberos, cabos, mandos y administrativos- están reivindicando lo que les corresponde "en justicia".

"Estamos preocupados por la retirada de los fondos que llegan al Consorcio vía Gobierno de Canarias, al igual que cualquier noticia que afecte a las partidas presupuestarias. Las medidas del Ejecutivo regional serán respetables en la medida que se respete a este colectivo", ha agregado el presidente de la junta de personal.

Martel no comparte la gestión que hace el Cabildo de Gran Canaria respecto al abandono presupuestario del Gobierno canario, ya que, en un principio, pretendía paralizar los procesos selectivos en curso, una opción que rechaza el colectivo por "incoherente", ya que las personas que se han presentado buscan la "estabilidad" laboral.

Así, unas 180 personas se han presentado para las plazas convocadas para los puestos de cabo y otras 800 para acceder a las 25 vacantes de bombero. "Tras el desmarque del Gobierno canario, ahora peligran las convocatorias", ha resaltado.

En esa línea, Martel ha subrayado que los bomberos reclaman desde hace meses que solucione la falta de personal del Consorcio y, sobre todo, que se gestione mejor el servicio de emergencias.