El palmeral de la entrada al pueblo de Firgas ha desaparecido y ha dejado una estela de acusaciones y de incógnitas sobre la responsabilidad del traslado de las plantas a la capital de la Isla para decorar los jardines del pabellón deportivo del Mundobasket. Los tres alcaldes que la tenido el municipio en este mandato, el actual Jaime Hernández (NC), el anterior Manuel Báez (CC) y la predecesora Paola Hernández (PP), están protagonizando una batalla política para determinar cuál de los tres es el culpable de la pérdida de las palmeras.

El nacionalista Manuel Báez abrió la caja de los truenos el pasado lunes al denunciar la eliminación del palmeral, situado en un terreno municipal de 300 metros cuadrados y en el que había unos 30 ejemplares de la especie autóctona, algunos de 50 años de antigüedad. El dirigente de CC, que perdió la Alcaldía el pasado 14 de diciembre por una moción de censura, acusó a su sucesor de "arrasar" ese patrimonio vegetal y de convertir la parcela de la entrada de Firgas "en un descampado".

Ese mismo día, Jaime Hernández aseguró que fue Báez el que inició las negociaciones con el Cabildo para trasladar las palmeras al pabellón Gran Canaria Arena, por lo que mostró su "sorpresa" por las críticas de CC. El actual alcalde también explicó que su grupo nunca ha tenido responsabilidades en las concejalías de jardines o de medio ambiente, que quedaron en manos del PP tras el cambio de gobierno, es decir, bajo la órbita de su socia Paola Hernández.

La respuesta de Báez fue acusar a Jaime Hernández de "mentir como un bellaco". "Siendo yo alcalde nunca se habló de arrasar el palmeral, sino de aclarar la zona para la supervivencia de las propias palmeras, pues la masificación de ejemplares aconsejaba trasplantar alguno de ellos a otro lugar d el municipio, pero no sacarlos de Firgas", aseguró el exalcalde.

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