El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, ha afirmado este jueves que "jamás he hecho un negocio en mi vida" y ha justificado sus actuaciones en torno a la declaración del Oasis de Maspalomas como Bien de Interés Cultural (BIC) porque "no he cometido acto ilícito alguno ni por acción ni por omisión ni antes ni después de ser presidente del Cabildo".
Bravo se explicaba así durante el pleno extraordinario que debate la creación de una comisión de investigación sobre las actuaciones del presidente del Cabildo en el entorno del Oasis, algo que no se produjo porque el portavoz del Partido Popular, Carlos Sánchez, avanzó durante su intervención que su partido votará en contra de la puesta en marcha de esa comisión.
El pleno rechazaba, con votos del equipo de gobierno y la abstención de Nueva Canaria, constituir la comisión de investigación que demandaban PSOE y CC para aclarar cuál ha sido el papel del presidente, José Bravo de Laguna, en el BIC del Oasis de Maspalomas.
No obstante, llegado el momento de la votación, Bravo de Laguna ha rehusado participar en ella, por tratarse de un asunto que le afecta directamente a él y a su hija, Elena, actual responsable del despacho de abogados que posee su familia.
La solicitud de la oposición se producía a raíz de la denuncia que investiga el fiscal decano de los Juzgados de San Bartolomé de Tirajana y de los documentos publicados por este periódico en las tres últimas semanas, que revelan que Bravo de Laguna intervino, antes y después de tomar posesión del cargo, en las operaciones urbanísticas para la rehabilitación del centro comercial Oasis, en las que se esperaban obtener unos beneficios de entre 20 y 27 millones de euros.
Bravo de Laguna ha tildado las informaciones publicadas de "campañón en mi contra y montaje bien urdido". Además ha criticado al PSOE y a Coalición Canaria por "unirse a la melé para criminalizarme. No es que me juzguen sino que me condenan", afirmó.
El presidente del Cabildo de Gran Canaria recordó que todavía "ni siquiera hay diligencias preprocesales" y que por sus tareas de asesoramiento al promotor Cristóbal Rodríguez Marichal "sólo cobré 18.000 euros". Además insistió en que su tarea de asesoramiento en torno al centro comercial oasis fue previa a su designación como candidato popular al Cabildo de Gran Canaria y que el contrato que su bufete firmó en ese sentido en junio de 2010 "lo di por rescindido verbalmente". Sobre la cláusula del millón de euros explicó que es una fórmula de compensación por objetivos y que "esas cosas podían pactarse en 2010 aunque nunca pensé que llegara a cobrarlo en la vida".
