Juan José García González es uno de los tres carpinteros tradicionales restauradores que quedan en la provincia de Las Palmas censados en la Fundación para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria (Fedac), un organismo autónomo dependiente del Cabildo grancanario. A su oficio artesano se une su ánimo emprendedor que le ha hecho regentar las dos casas rurales Las Calas, en Valleseco, las primeras registradas en el municipio.

"Yo me dedico a esto desde hace mucho tiempo. Yo trabajaba antes con mis hermanos, cinco, en una carpintería. Primero estaba en Fontanales y luego en Valleseco, hace ya catorce años, aunque me dedico solo a la artesanía y a restaurar muebles. Solo para ir a la feria de artesanía y por contactos con la Fedac. Ahora voy a poner a mi hijo de 26 años, que va a sacar el carné en septiembre en este negocio. Así irá él a la feria". Reconoce que tiene más trabajo de restauración de muebles que de artesanía. "He dado muchos cursos, el año pasado en Ingenio de tres meses, y con el Ayuntamiento de Valleseco estuvimos seis meses casi".

Lo que más restaura son arcones antiguos, baúles de latón, alcobas completas? "Uso máquinas para restaurar, raspillas primero y luego una pulidora, no le doy nada de sosa cáustica ni ninguna sustancia para quitar barnices. Todo es natural, con raspilla y lija. Ninguna máquina de más. La restauración debe ser artesana. Si le metes una máquina a la marquetería, te la cargas. Hay que tener mucho cuidado".

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