Fernando Toscano vive una auténtica odisea para tratar de devolver 2.000 euros al Ayuntamiento de Firgas. El exconcejal y profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria lleva más de dos años tratando de reintegrar las dos pagas extraordinarias que ingresó irregularmente por desconocer la Ley de Incompatibilidad, al trabajar para dos Administraciones. En este tiempo ha tratado de resolver el conflicto por todos los medios, pero no ha conseguido nada. Ni siquiera tras la resolución de mayo de este año de la Audiencia de Cuentas, a la que también tuvo que acudir, y cuyo informe habla de que el pleno en el que se aprobó su dedicación parcial como edil de Urbanismo en 2011 "estuvo viciado".

Fernando Toscano se presentó en las últimas elecciones municipales con el número cuatro por Coalición Canaria. Un pacto de su grupo con el Partido Popular (PP) le permitió acceder al gobierno de Firgas como concejal de Urbanismo, sin dejar de lado su labor como profesor de la Facultad de Ingeniería Industrial de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, donde es subdirector en el departamento de diseño industrial. Su intención era "tener mucho contacto con los ciudadanos y dedicarle mucho tiempo al cargo". Por eso aceptó una dedicación parcial en las oficinas municipales, aunque eso le suponía el doble esfuerzo de compaginar ambas responsabilidades.

En esas tareas estaba, hasta que la Universidad le alerta de su irregularidad después haber percibido la segunda paga extra en verano de 2012 (la primera fue la navidad anterior de 2011). Por este motivo, el 14 de junio de 2012 presenta ya un escrito a la entonces alcaldesa, Paola Hernández (PP), donde le solicita que no se le ingresen por incompatibilidad más pagas extra, y que se le descuente de su nómina las cantidades ya percibidas. Pero Intervención le insta a que resuelva el problema en su trabajo. "Me dijeron que tenía que saber las leyes y que, por parte del Ayuntamiento, estaban bien pagadas".

Desde entonces ha vivido una auténtico martirio personal para tratar de reingresar los 2.000 euros. La situación que vivía le generó tal estado de inquietud, que decidió entregar su acta de edil en Firgas en noviembre de 2012. Alegó en aquel momento razones personales, pero en el fondo estaba el grado de tensión que, insiste, le causó esta situación personal.

Acudió a expertos legales para saber qué pasos debía dar a partir de ese momento, y tratar de regularizar su situación fiscal en ambas administraciones. Por eso decidió ponerse en manos de la Audiencia de Cuentas. El secretario general de este órgano fiscalizador resolvió en mayo de este año que el concejal solo pudo percibir de su actividad principal las pagas extraordinarias al concurrir dos administraciones. En este caso, se trataría de la Universidad. Y, por eso deberá devolver ambos ingresos extraordinarios del Ayuntamiento, como ya él sabía. La Audiencia habla de que el pago municipal "estuvo bien hecho". Pero su dictamen fue más allá. Y advierte de que el pleno de aprobación de la nómina celebrado el de julio de 2011 "está viciado", por lo cual constata que "se ha de efectuar la revisión". Es decir, volver a convocarse y aprobarse los puntos.

En el limbo

A pesar de su batalla y cinco meses del citado dictamen, Fernando Toscano lamenta que el alcalde, Jaime Hernández, no haya resuelto esta situación. Mientras, sigue esperando que le digan dónde depositar los 2.000 euros de las dos pagas extras. "El dinero ahora está en el limbo", según su descripción. Y, sobre todo, no quiere que su caso se manipule en el municipio con un "uso sesgado de la información", y traten de echárselo en cara en el futuro de manera torticera.

"Yo no quiero comerme todo el marrón". Toscano recuerda que en el pleno de las dedicaciones el actual alcalde, Jaime Hernández, cuestionó las incompatibilidades. Por eso, lamenta que ahora que está en el cargo no ha resuelto esta conflicto, pese a que la Audiencia como responsable de fiscalizar las cuentas haya dictado su resolución.