Isabel Guerra entregó ayer su acta de consejera del PSOE en el Cabildo de Gran Canaria, con lo que puso fin a una veintena de años de militancia socialista. Tras darse de baja del partido por discrepancias con la dirección regional y con sus compañeros en el grupo del Cabildo, Isabel Guerra formalizó su renuncia al cargo ante el secretario de la corporación, pero no pudo retirar sus pertenencias. Sobre su futuro político aseguró que no ha tomado ninguna decisión, aunque baraja concurrir en Teror.