El primer alcalde del periodo democrático de Valleseco, Rogelio Santana Guerra, fallecía en la tarde del domingo a los 90 años. Durante tres décadas permaneció en la vida política municipal, y de ellos casi 16 como alcalde.

Fue regidor entre 1968 y 1979, designado por el gobernador civil, y ganó posteriormente las primeras elecciones municipales democráticas celebradas en 1979, manteniéndose hasta 1983.

"Cuando llegué no había agua ni luz en el pueblo, pero cuando me marché todos los barrios ya las tenían. Aquí había un pilar al que iba la gente a cargar una lata de agua. Y le decía a don Gregorio, el anterior alcalde, que por qué no le metía mano al asunto del agua, pero me decía que no podía ser porque el negocio era del jefe provincial del Movimiento. Pero al final, cuando llegué a la Alcaldía, yo lo conseguí. Teníamos el agua en Valleseco pero se beneficiaban en Arucas, Firgas y Teror, que eran unos espabilados", declaraba en una entrevista a este periódico en octubre de 2010, criticando en sus declaraciones el afán de muchos políticos en estos tiempos modernos por cobrar un buen sueldo. "Yo no cobré nunca", remarcó al respecto.

El alcalde en funciones, Dámaso Arencibia, decretó dos días de luto oficial y que las banderas ondeen a media asta en señal de luto desde la mañana de ayer. Su cuerpo está siendo velado en el salón de plenos de las Casas Consistoriales hasta mañana martes, donde se celebrará a las 17 horas la misa exequial, según lo responsables municipales.

Entre las grandes logros de la etapa al frente del municipio de Rogelio Santana se incluye la colocación del alcantarillado y el asfaltado de las calles del casco, así como la nueva electrificación. Pero, sobre tod, que llevara el agua de abasto a los barrios de Lanzarote, Madrelagua, al casco propiamente dicho, Zamora, La Herrera, La Laguna, Zumacal, Sobradillo y Monagas.

También se consideran como muy importantes y relevantes para el municipio la construcción del Colegio Rey Juan Carlos I, el propio edificio del Ayuntamiento, el campo de fútbol de La Laguna, la casa parroquial y la adquisición del área recreativa la Laguna.

En octubre de 2007 recibió un homenaje en el Ayuntamiento. Y el alcalde Damaso Arencibia le entregó una placa al merito de su labor.

Quienes le conocieron dicen que era "una persona que se caracterizó por delegar responsabilidades, siempre con el objetivo de luchar por Valleseco".

Hoy martes, a las 17 horas, se celebrará su misa-funeral en la Parroquia de San Vicente Ferrer. Y, posteriormente, será trasladado al cementerio.