El empresario y fundador de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Vecindario (Ascoive), Antonio Cáceres, sugiere que el Cabildo y los ayuntamientos de Ingenio, Agüimes, Santa Lucía y San Bartolomé de Tirajana planten un millón de olivos, que daría trabajo a muchos desempleados de larga duración y que después podrían crear empresas propias.

"No se corresponde para nada el empleo que existe con las fuentes de riquezas que tenemos en el Archipiélago. Tenemos demasiados parados que debemos recuperar dándoles oportunidades de trabajo y formación con lo que conseguiríamos reducir el costo social y convertirlo en riqueza para todo". "No tiene sentido que importemos de todo, mientras aquí la gente esta en el paro y nos cuesta mucho dinero en desempleo, sanidad y educación", agrega Cáceres, quien lamenta que pese a tener terrenos para plantar forraje para desarrollar la ganadería, se esté tirando el agua depurada al mar.

El empresario indica que la reforma de miles de apartamentos obsoletos daría trabajo a muchas personas como arquitectos, aparejadores, albañiles, fontaneros y peones. Cáceres considera que los cabildos y ayuntamientos deben desarrollar proyectos de al menos 10 años, y crear escuelas de desarrollo en agricultura, ganadería, industria y construcción.

"Podrían contratar de uno a diez personas en tareas de jardinería, limpieza, albañilería, etc. con horas y días libres, para aprender e ir creando, su cultivo o empresa", insiste Cáceres.