Los once firmantes de la moción de censura contra Isabel Guerra sostienen que "es el momento del compromiso, de ser valientes y asumir responsabilidades", en clara referencia a la dificultad de explicar un pacto de gobierno entre el PSOE y PP. Aunque desde ambos bandos reconocen que es una situación excepcional, tienen a su favor que el anterior pacto entre el PP y NC era aún más injustificable, solo entendible en las claves de la política municipal y por el precedente de una hegemonía de los socialistas de Teror durante más de veinte años.
"Los ciudadanos -apunta la moción- nos han elegido para tomar decisiones en momentos difíciles, en base a unos principios y en beneficio de nuestra Villa, por encima de intereses partidistas que tienden a dejar que el tiempo pase y lograr un rédito electoral a costa del sacrificio de todo un pueblo. Elegimos lo responsable, no lo cómodo, conscientes de que asumimos una decisión importante, pero convencidos de que lo hacemos en beneficio de todos y con el respaldo que nos otorgaron más del 70% de los votantes a los dos partidos que proponemos la moción".
En la justificación de la censura, los ediles de PSOE y PP aseguran que lo hacen pensando en Teror, y sobre todo en sus ciudadanos. "No podemos ser cómplices en mantener una forma de gobernar y una realidad que en nada favorece a nuestro pueblo, y que por responsabilidad no podemos permitir que éste siga a la deriva, teniendo en nuestras manos la posibilidad de intervenir para revertir esta situación anómala", puntualizan.
Ante ello, agregan, se acuerda "dar una respuesta contundente a la amplia demanda ciudadana de cambio de forma de gobernar y de rumbo".