Las campañas de concienciación ciudadana contra el abandono animal sigue sin dar resultados en Gran Canaria. Unos 2.787 mascotas, de los que 2.288 son perros y 499 gatos, han acabado en los primeros nueve meses del año (enero a septiembre) en el Albergue insular de Bañaderos. Esto significa que cada día se han abandonado en este centro del Cabildo de Gran Canaria unos nueve perros y casi que dos gatos. La media mensual es de 250 perros, pero la cifra sube a 300 en verano. El perfil del can abandonado, corresponde con el de un ejemplar mayor, casi siempre enfermo, de las razas podenco, pit bull o stanford, pero mestizos, y no de pura raza.

Aunque estos datos están un poco alejados de los 5.000 animales que llegaban hasta 2016 , procedentes de 19 municipios de la Isla, a estas instalaciones, la cifra sitúa todavía a la Isla a la cabeza de los índices estatales de abandono. Más de la mitad de estas mascotas han sido abandonadas por vecinos de Las Palmas de Gran Canaria, y de Telde que remitieron al 40% y al 16% de animales respectivamente. Por contra, Ingenio, Mogán y Agüimes no envían animales a Bañaderos porque cuentan con instalaciones para acoger de forma temporal a perros y gatos.

"El centro es parte del problema pero no la solución" destacó ayer el consejero de Medio Ambiente, Miguel Ángel Rodríguez. "Hay que cambiar el modelo pues de lo que se trata es de concienciar a la gente de que cuando adquieren una mascota deben hacerlo de manera consciente y que, de tener que desprenderse de ella más adelante por cualquier razón, deben buscar a quién traspasarla" añadió en la presentación del balance de la gestión de estas instalaciones, que lleva desde comienzos de este año la empresa Gesplan, y a la que se según dijo se volverá a renovar el contrato para 2018.

Menos sacrificios

El consejero puso de relieve la reducción del número de sacrificios que se han practicado este año en el Albergue que ha bajado al 12,7%, frente al 70% que se realizaba con anterioridad. Tras explicar que todas estas muertes se han llevado a cabo por prescripción veterinaria, añadió que "ojalá se pueda llegar a la eutanasia cero".

La única opción que les queda a estos animales para dejar el centro de Bañaderos es la adopción puesto que son muy pocos los que vuelven con sus dueños. Sólo 100 perros y 15 gatos lo lograron, pero se considera que fue porque se perdieron. Pero, la realidad es que algo menos de la mitad logra una nueva casa de acogida. De hecho de los 2.787 casos de abandono que se han dado este año han sido adoptados 1.291, entre los que los perros, con 1.060 siguen siendo mayoría frente a los 231 gatos. Con el fin de facilitar los trámites de adopción a las familias, el Cabildo ha decidido ampliar el horario de atención al público los sábados y domingos, y los lunes por la tarde. Desde mediados de noviembre el centro estará abierto de las 10.00 horas a 12.00 horas, y de 17.00 a 18.30 horas de lunes a viernes, y los fines de semana de 9.00 horas a 14.00 horas.

El mantenimiento de las instalaciones del Albergue le ha supuesto al Cabildo en estos nueve meses unos 358.650 euros, de los que la mayor parte, unos 203.246 euros se fueron en abonar las nónimas de la plantilla de este centro, otros 10.072 euros en el personal de Gesplan, mientras que en alimentos se gastaron 19.108 euros, 5.637 euros en luz y agua, y 71.063 euros en material clínico. El coste de mantener a cada mascota se sitúa en los 150 euros.

Capacidad para 400

El consejero admitió que se trata de un "centro antiguo y masificado" pues tiene capacidad para 400 animales y la media que está allí alojado es de 1.000, subrayó que se ha hecho un esfuerzo inversor para renovar las jaulas grupales, las cubiertas de uralita, los almacenes y los quirófanos y "no se ha mermado la calidad de vida que merecen los animales".

En este sentido, comentó que el Cabildo ha afrontado obras de mejora de las instalaciones del albergue por importe de 150.000 euros y ha duplicado el presupuesto de este año, que ha pasado de algo más de 300.000 euros a 600.000, pero insistió en que nada de ello lo resolverá si la ciudadanía no asume su responsabilidad. El director general de Medio Ambiente, Manuel Amador, contó que se visitado el Albergue de Madrid para ver como se gestionaban este centro, que dispone de 10 millones de prespuesto, pero remarcó que se ha visto que si bien se trata de unas instalaciones dignas, lo importante es invertir el problema, y lograr que no haya tantos abandonos.

Precisamente para evitar que lleguen menos animales, según dijo el consejero, a partir de este mes se dejarán de recibir en Bañaderos a los animales que tengan chip identificativo, y se va a reclamar a los ayuntamientos que busquen al propietario, y en elcaso de que se nieguen a recoger a la mascota abona la sanción que puede llegar a los 15.000 euros, porque se trata esta un delito. Según aseguró, sólo el 20% de los perros y gatos que son abandonados en Gran Canaria llevan el chip identificativo mientras que el 80% no tiene esta placa que deben tener por ley.

Miguel Ángel Rodríguez denunció que el problema está en que los ayuntamientos no asumen su responsabilidad se hagan cargo de controlar y sancionen cuando sea preciso y se doten de centros temporales de acogida de animales que todos deberían tener por ley pero que de los que carecen en la mayoría de los casos, a fin de conseguir que la ciudadanía cambie de actitud. Para hacerlo posible, aseguró que su departamento tiene previsto destinar algo más de un millón de euros en subvenciones a los ayuntamientos para que puedan tener los centros de estancia temporal, partida que dijo que se llevará al pleno del próximo mes para su aprobación.