Rubén Minguez (Valencia, 1979), concertista de guitarra clásica, que imparte clases en la Academia de Gante (Bélgica) donde también dirige la orquesta Go Guitars, llevaba tiempo que quería participar en el encuentro que se celebra cada año en Guía en torno a este instrumento. Desde que conoció al artista grancanario Derque Martín cuando éste era estudiante de Erasmus en la ciudad belga, tenía en mente participar en un intercambio de orquestas de guitarraen las Islas. Entonces la idea no cuajó, explica, pero ahora, tras aceptar la invitación de José María Ramírez, profesor del Conservatorio Superior de Música de Canarias, y director de la cita musical de la Ciudad los Caballeros, lo ha logrado, y además ha tenido la oportunidad de compartir cartel con su amigo Martín.
"Hay profesores de mucho nivel y de prestigio internacional. Es una experiencia envidiable" declara el músico, horas antes del concierto de Go Guitars, que se ofrece hoy en el Teatro Hespérides.
El grupo lo componen abogados, ingenieros, profesores y también jóvenes estudiantes de música, y todos, unos veinte, como apunta su director, han acudido no sólo a tocar la guitarra clásica sino también a aprender de los maestros que han acudido a este encuentro, que ya es el número veintitrés que se organiza en torno a este instrumento en la ciudad de Guía.
Resalta así la oportunidad que ha tenido de conocer de cerca los conocimientos de artistas que cuentan con un palmarés a sus espaldas como Enno Voorhort, profesor en el Real Conservatorio de La Haya; la canadiense Laura Young, actualmente profesora en Mozarteum Salzburgo; y Eligio Quintero, especialista en música antigua y promotor de la Camerata Cayrasco.
Feliz de trabajar en lo que le gusta y haber podido desarrrolar su carrera musical en la guitarra, y conseguir compaginar también su profesión con sus responsabilidades como padre, cuenta como en su vida han estado las Islas desde joven. Fue en Tenerife, adonde se trasladó su familia cuando tenía quince años, donde empezó a estudiar guitarra clásica, en la escuela musical de Arona. Su intriga por conocer otros lugares y culturas junto a la invitación de su tío, le llevaron a Gante, y lo que era un plan para un año se ha convertido en todo un proyecto de vida. "Tengo morriña a veces, pero estoy muy bien allí" precisa. En esta ciudad belga además se ha formado en la academia de música mientras trabajaba en la hostelería, y después realizó un master de tres años en el conservatorio.
Ahora, desde su faceta como profesor, comenta como en Bélgica "la música es muy accesible" pues cada ciudad tiene un conservatorio elemental y medio. Según explica el trayecto musical está dividido en tres niveles de tres años y si se empieza desde pequeño hay un año extra de solfeo al inicio.
Pero, es dirigir Go Guitars lo que mantiene viva su alma de artista. "Ni me lo pensé dos veces cuando el director de la escuela de música me planteó si quería encargar de la orquesta", revela.
Y de una asignatura optativa de segundo y tercer grado,se ha dado paso a un proyecto musical, pues ofrecen conciertos en varias ciudades, y con el tiempo también se han incorporado exalumnos. En su periplo por otras ciudades hace dos años participaron en un intercambio con la orquesta de la escuela de Pinto en Madrid. Aunque sin duda, el reto de su director era compartir sus experiencias con otros músicos en Guía.
