Será porque Yaiza Martínez Saavedra nació en pleno calor del agosto, el del año 1977, que poco después se metió en dos piscinas, la del agua y la de los libros. Hija de campeones en natación, inicia su carrera deportiva con apenas tres años y llega a participar en el Campeonato de España y en juegos internacionales, como el de las Azores. Vivía pues, entre el Club Natación Metropole y la Aneja de Magisterio, donde cursa EGB, y el Instituto Pérez Galdós, donde cumplimenta el bachillerato.
Recuerda que "desde la adolescencia y hasta los 18 años entrenaba dos sesiones al día, una a las cinco y media de la mañana y otra por la tarde". Los deberes los tenía que hacer en el recreo, y ligerita porque los fines de semana tocaba competición o travesías: "me encanta nadar en mar abierto".
Pero no es lo único que le encanta. "Uno de mis regalos navideños preferidos eran los libros que me regalaban mis tíos, unos 6 ó 7, y que me leía uno tras otro desde el día que los tenía en mis manos". Y si no los tenía pues intentaba crearlos, escribiendo cuentos y relatos breves. " Lo que más me gustaba en el colegio era hacer dictados, tengo una obsesión con las faltas de ortografía".
Con esas tablas, hace "una maleta más grande que yo" y se embarca a Barcelona a cursar Periodismo en la Universitat Autònoma, aprendiendo catalán a marchas forzadas.
Pero termina el primer ciclo y decide cambiar de rumbo, por lo que decide hacer Comunicación Audiovisual. "En Periodismo", explica, "apenas teníamos prácticas y había mucha teoría, mientras que los estudiantes de Comunicación Audiovisual no paraban y le veía más salida para un futuro profesional".
Así fue como entra en la productora Gestmusic como becaria en el último semestre de la carrera, justo cuando empezaba la primera edición de Operación Triunfo "y necesitaban gente en el Canal 24 h. Aquello fue el paraíso del aprendizaje, en verano nos dejaron hacer turnos y probamos todo lo que había: guión, producción, realización, música...".
"No he tenido mejor escuela que el Canal 24h", añade, con un primer reportaje que consistió en cubrir la grabación del videoclip de David Bisbal del tema Lloraré las penas que protagonizaba Mónica Cruz".
Para su sorpresa OT se convirtió en un fenómeno social y un éxito televisivo sin precedentes "y me hicieron el primer contrato". A día de hoy suma 17 años en la productora. En una primera etapa trabaja en el departamento musical, con un horario que le permitía la conciliación familiar.
"Desde siempre tuve un instinto maternal a tope", y vio el momento exacto para cumplir el sueño, con dos hijos que ya tienen diez y trece años, pero sin perder de vista la evolución de las cosas. "Empecé a interesarme en las redes sociales, y me volví una fanática", de manera que se forma como Community Manager, y comienza a ocuparse de las redes sociales de Tu Cara Me Suena, hasta que su jefe, Tinet Rubira, le ofrece llevar la comunicación de El Número Uno. Así pasa dos años gestionando la información de todos los programas de Gestmusic, "hasta que un día en el plató de Tu Cara Me Suena, justo en el camerino de Carlos Latre, Rubira me propuso el puesto de directora de Comunicación, que de nuevo acepté sin dudarlo".
En estos momentos es responsable de los departamentos de prensa de las diferentes cadenas, así como del contenido de la web de Gestmusic, de las redes sociales corporativas y de los diferentes programas, así como de la comunicación interna de la compañía, de forma que gestiona todas las entrevistas de los presentadores, concursantes y jurado de los diferentes programas. Es tal el trajín, que vive con el móvil encendido los 365 días del año, "en alerta por si se abre algún fuego, apagarlo de inmediato con una buena comunicación que implica, ante todo, transparencia y frenar el efecto bola de nieve lo más rápido posible".
Asegura que "el mayor nivel de estrés que he sufrido en mi carrera fue cuando me coincidió OT: el reencuentro con Tu Cara Me Suena. De repente me vi gestionando la agenda de los 16 concursantes del primer programa, junto con nueve del segundo, más el jurado y el presentador. El teléfono sonaba de lunes a domingo". Algunas de las llamadas son de personas que se hacen pasar por periodistas, "para saber dónde grabábamos o para pedirme entrevistas con artistas e intentar conseguir sus teléfonos. Fue una auténtica locura".
Este año, tras el boom de Operación Triunfo 2017, lleva muchos cuestionarios de trabajos de fin de grado respondidos. "Esos estudiantes me preguntan sobre cómo está el sector, qué posibilidades hay de conseguir trabajo, y les digo que no es fácil, pero tampoco imposible". Yaiza explica que "con la llegada de nuevas plataformas para consumir contenidos se ha provocado una fragmentación de la audiencia, con un consumo bajo de demanda cada vez mayor".
Así, y en el caso de la última edición de OT, la gala en directo en televisión era, más que una gala, "un evento al que iba el público que teníamos en las redes sociales y que seguía de cerca la evolución de los concursantes en el Canal 24h de YouTube. "De no ser por el canal 24h", sentencia, "no hubiésemos podido arrastrar al público joven a TVE, porque es un target que no tiene habitualmente".
Considera que "trabajo hay, pero suelen ser en proyectos de tres a cuatro meses en el caso de un programa en prime time, ya que si se anota un índice bajo de audiencia durante varias semanas consecutivas, suele desaparecer de la parrilla televisiva, y por lo tanto, la parte del equipo que no es de plantilla fija, se queda sin ocupación".
Además apunta que la mayor parte de la oferta laboral en el sector audiovisual se encuentra en Madrid, "pero Canarias experimenta un crecimiento gracias a las series y películas que se están rodando en las islas, hecho que conlleva una mayor promoción del archipiélago, y por tanto, un reclamo en el sector del turismo. Creo que el punto fuerte es el cine, y hay mercado por explorar. Y en este sentido, profesionales del sector en Canarias señalan un déficit, por ejemplo, en empresas de casting".
