La sorpresa, sobre todo para los más jóvenes, fue el sentimiento de numerosos vecinos y curiosos al ver inundada y llena de piedras y arena la avenida de los Pescadores y terrazas de Playa de Arinaga, en el municipio de Agüimes, durante la mañana y la tarde de este miércoles.
El reboso que se produjo durante la primera pleamar, después de las 07.15 horas,fue acompañado por la embestida de olas de entre cuatro y cinco metros de altura. Los daños fueron en el mobiliario urbano, como papeleras. También se podían encontrar muchas losas partidas o simplemente que están fuera de su sitio natural.
Muchos quedaron muy extrañados por la imagen inusual, por ejemplo, de encontrar los bancos del paseo, con sus respaldos de madera, rodeados de piedras.
Las cuadrillas de trabajadores municipales comenzaron rápidamente las labores de limpieza y recogida de piedras. La inquietud la tenían muchos por las posibles consecuencias de la siguiente pleamar de hoy, en torno a las 19.00 horas.
Algunos residentes intentan hallar una explicación a esa inusual resaca en pleno verano, en la que se habrían registrado olas de hasta cinco metros de altura, y la atribuyen a una anticipación de las conocidas como 'mareas del Pino', propias del final del estío y coincidiendo con la celebración del día de la patrona de Gran Canaria, en los primeros días de septiembre.
