"Los parques están abandona-dos, y no están sucios, más bien están podridos". Es la impresión que tiene Lali Torres, vecina de San Bartolomé de Tirajana, sobre la situación de "extrema suciedad y abandono" que padecen gran parte de los parques infantiles ubicados en el municipio. Columpios rotos, y algunos directamente inexistentes y sin reponer, mobiliario público rayado y sucio, restos de comida y heces de animales en el suelo y pavimento levantado, con numerosos desniveles. E incluso mal olor. La que debiera ser un área de uso y disfrute de los más pequeños atraviesa, para madres y padres, una "situación límite" que incluso compromete la seguridad y la integridad física de los menores.
Los parques ubicados en la zona conocida como la Viuda de Franco, y el de Pocoyó, localizado en la Avenida de Gáldar, son dos ejemplos de la falta de mantenimiento. El primero presenta un pavimento prácticamente destrozado, con la grava suelta en el suelo, los toboganes y resto del mobiliario con grandes desperfectos y en mal estado y falta uno de los columpios. "Da la impresión de que está abandonado, no solo por el estado que presenta la zona infantil, sino también por las áreas ajardinadas que lo rodean", señaló ayer Iván Pérez, vecino de la zona, "a excepción de varios árboles, el parque está muy seco".
En este sentido, Maica, una turista asturiana, criticó también la falta de vegetación que ofrezca al parque un mejor aspecto. "Se ve a leguas la suciedad que presenta; y desgraciadamente da muy mala imagen para los turistas que venimos a pasar unos días a la Isla", apuntó Maica, "aunque por suerte no ocurre lo mismo en todos los municipios".
El segundo parque, el de personaje infantil Pocoyó, muestra un aspecto aún más desgarrador. El pavimento está completamente descuidado y en algunas zonas el suelo de goma ha desaparecido dando paso a una superficie dura que se presenta peligrosa para los menores. "¿Cómo puede dar seguridad a un niño un parque que está lleno de pequeñas piedras y basura?", se preguntó O. J. G, un residente de origen alemán, "los parques se utilizan, pero luego no pasa el servicio de Limpieza". En su opinión, "se hacen buenas reformas, pero luego todo se va al garete; y en esta situación a veces no sabemos dónde ir con los niños".
La impresión general es siempre la misma: falta de mantenimiento en los espacios públicos, y en el caso de los parques ésta se agrava porque pone en jaque la seguridad de los niños. "Espero que no tengamos un día una desgracia", apuntan los vecinos. Álvaro Ortiz lamentó que esta situación se extienda a muchos parques del municipio. En su caso, dice, ha optado por evitar ir con sus hijos a estas instalaciones públicas. "Da pena, pero no solo en los parques, también en el resto del municipio", añade, "las aceras y las carreteras están sucias, y no se entiende esta situación cuando el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana es uno de los más ricos de España".
