Los ayuntamientos del Norte aceleran la firma de convenios para intercambiarse sus policías locales en las fiestas y espectáculos públicos, ante la escasez de personal de las plantillas en los pueblos. La Mancomunidad regulariza de esta forma una práctica muy extendida, pero que también es irregular, y que generaba muchos recelos entre los interventores municipales, que han puesto reparos al realizarse pagos a funcionarios ajenos sin un amparo legal.

El Ayuntamiento de Valleseco aprobó en el último pleno un convenio con Artenara, Tejeda y Moya para que sus respectivos policías refuercen las fiestas. Son los últimos acuerdos ratificados, pero que se ha venido repitiendo entre la casi totalidad de los municipios de la comarca, ante la falta de una ley canaria que establezca un marco de colaboración y que es muy improbable que se apruebe durante esta legislatura.

La Mancomunidad realizó tres borradores previos hasta que llegó a un cuarto documento que ha contado con el visto bueno de la dirección general de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, y que ha servido de modelo para ayuntamientos de todas Canarias, que tienen el mismo problema. Hay que tener en cuenta que esta es una demanda que se venía realizando desde hace años por la Federación Canaria de Municipios (Fecam).

La práctica de prestarse policías locales en las fiestas y actos multitudinarios no es nueva. El ejemplo más clara está en las fiestas del Pino de Teror, donde colaboran funcionarios de muchos municipios, que ejercen de refuerzos para atender una seguridad que resulta necesaria las 24 horas del día.

El problema ha venido luego, a la hora de abonar esas horas de trabajo a los agentes invitados. Al tratarse de funcionarios de otros pueblos, y no estar en sus respectivas plantillas, los interventores de los ayuntamientos han puesto muchas objeciones a estos pagos por la falta de cobertura.

La Mancomunidad ha tratado también de evitar que un accidente de estos policías de refuerzo pudiera ocasionar una responsabilidad judicial.

El convenio interadminsitrativo entre los ayuntamientos en materia de atención eventual a necesidades municipales en materia de seguridad, como se denomina, establece que atendiendo al régimen funcionarial de los policías locales, la fórmula más idónea para llevar a cabo la cesión temporal de los mismos es través de una comisión del servicio en atribución temporal de funciones.

El acuerdo tiene una especial trascendencia, porque la mayoría de localidades tiene la plantilla de policías bajo mínimos, al no convocarse oposiciones durante años para reforzar las plantillas. Esto hace que, incluso sin ser días de fiestas, no se cubran en determinadas situaciones hasta los turnos de noche, dejando en manos de la Guardia Civil estas funciones.

Al acuerdo se han ido sumando casi todos los municipios del Norte. Y, para la cesión, cada alcalde "aprobará un decreto cediendo el personal en comisión de servicios en atribución temporal de funciones al otro ayuntamiento de destino por un periodo de tiempo determinado, aprobándose también mediante decreto del alcalde del municipio de destino las condiciones de recepción, determinando especialmente las condiciones económicas de prestación del servicio, tales como las indemnizaciones por razón del servicio y las horas extraordinarias".