Marilia Monzón seguirá su formación en la academia de Operación Triunfo 2018. La galdense consiguió el favor del público para superar a su rival en la nominación, Noelia Franco, al obtener una justa ventaja del 50,2% de votos en la gala de este miércoles.Su ajustada victoria se debió en parte al apoyo de familiares, amigos y vecinos de Gáldar.

El municipio en peso se movilizó para salvar a la concursante y posibilitar que continúe su formación en el programa de Televisión Española. La colaboración del Ayuntamiento en la campaña de apoyo a Marilia durante toda la semana llegó anoche a su apogeo con la proyección en directo de la Gala 7 del concurso de talentos en el Teatro Consistorial. Algo más de un centenar de personas acudieron a la cita para disfrutar de las actuaciones y asistir emocionados al momento en que el presentador de OT, Roberto Leal, comunicó que Marilia se quedaba.

VÍDEO DE APOYO A MARILIA DESDE GÁLDAR:

Objetivo logrado, Marilia Monzón, que ha destacado en su paso por la academia por su dulzura canaria y su voz, con la que ha enamorado a la audiencia, bordó anoche su tema, la canción María se bebe las calles, de Pasión Vega. Mientras Marilia cantaba y Gáldar vibraba con ella, su hermana Nadia aguardaba el final de la actuación para darle un abrazo. "Estamos super orgullosos y estamos fuera apoyándote. Queremos que te quedes", le comentó.

Era la primera vez que Marilia se enfrentaba al público en una gala con la espada de Damocles sobre su cabeza, es decir, en condición de nominada. Su marcha del programa hubiera dejado a Canarias sin representantes en el concurso de Televisión Española. Ya que el otro participante canario de esta edición, el tinerfeño Damion, abandonó la academia la semana pasada.

Marilia no corrió la misma suerte con ayuda de sus paisanos y en una gala con marcado acento canario, donde los concursantes Alba y Carlos interpretaron el tema Contamíname, del cantautor tinerfeño Pedro Guerra.

La galdense ha conseguido prolongar su estancia para seguir su formación y poder disfrutar, por ejemplo, de las clases de interpretación de los Javis, recién incorporados a la docencia en esta edición del concurso tras el fulminante despido de Itziar Castro.