"Era increíble que formando parte de un municipio turístico y siendo además uno de los más ricos de Gran Canaria no tuviéramos saneamiento en el pueblo; pero ahora estamos encantados". Así se expresó ayer Faina Hernández, vecina del barrio de Barranquillo Andrés, ubicado en la zona alta del municipio de Mogán, después de que hace tan solo una semana el Ayuntamiento haya puesto en funcionamiento la red de saneamiento del pueblo, una reivindicación de los vecinos desde hace más de dos décadas.

Los residentes en este pago de las medianías de Mogán, muy cercano a la presa de Soria, celebran la llegada del saneamiento, una instalación que les ha permitido dar el salto al siglo XXI, al menos en lo que a este tipo de servicios se refiere. Y es que hasta ahora muchos se habían visto obligados a disponer en sus viviendas de pozos negros para almacenar las aguas fecales y que posteriormente tenían que evacuar ellos mismos.

Los trabajos para la instalación de la red de saneamiento y alcantarillado de Barranquillo Andrés han posibilitado canalizar a lo largo del barranco 5.000 metros de tuberías que darán cobertura a todas las viviendas del barrio, unas 80 casas, y servicio a las 120 personas que viven en él. Las tuberías se han colocado sobre la pendiente del terreno, motivo por el cual no ha sido necesaria la instalación de estaciones de bombeo en el camino, un aspecto que inquietaba a los residentes del pueblo debido a los malos olores que generan y al elevado coste de mantenimiento.

Abandono

Las obras concluyeron el pasado mes de mayo, tras una intervención que se prolongó durante cinco meses, pero no se había podido dar de alta por no disponer de conexión a la red eléctrica, según explicó ayer el concejal de Obras Públicas del Ayuntamiento de Mogán, Ernesto Hernández, un proceso que culminó recientemente y que ha posibilitado la puesta en marcha del servicio.

El desarrollo de las obras, en las que el Consistorio moganero ha invertido una partida de 900.000 euros, ha sido complicado, explicó el edil, como consecuencia de la difícil orografía del terreno en esta zona del municipio. "Reconocemos que era una labor compleja debido a que las viviendas se encuentran muy diseminadas por el pueblo", señaló Luis Sánchez, vecino de este pago, "pero no podíamos tolerar que el barrio estuviese tan abandonado en un servicio tan básico como es el de la evacuación de las aguas fecales; ahora haremos una vida más normal aún si cabe". "Parece mentira, pero ya es una realidad", añadió.

"Comprendemos que vivimos separados, pero no entendemos por qué se ha tardado tanto en la instalación cuando hay lugares con menos población que disponen de una buena red de alcantarillado", criticó por su parte Soraya Álamo, residente en la zona, quien, no obstante, también celebró la efemérides. "No cambio Barranquillo Andrés por ningún otro barrio", apuntó.

Los trabajos de instalación de la nueva red de saneamiento incluyeron también la renovación de algunas tuberías. "Aprovechando que interveníamos para instalar la red de saneamiento, cambiamos las tuberías que sí existían debido a que eran muy antiguas y habían quedado inutilizables", añadió el concejal de Obras Públicas, Ernesto Hernández.

Paralelamente, este proyecto para la mejora del barrio incorporó el traslado de la depuradora desde la zona central del pueblo, ubicada junto a un área deportiva, hasta las afueras, a más de un kilómetro de distancia, y a una cota inferior, una medida que los vecinos también ha recibido con agrado debido a que ahora no tienen que soportar los malos olores que desprende una instalación de estas características. "Y tampoco los mosquitos ni las ratas", señalaron.

Los residentes de Barranquillo Andrés estrenan red de alcantarillado y saneamiento, un servicio que, aunque básico, ha llegado con décadas de retraso. El Ayuntamiento realizará la inauguración oficial la próxima semana.