El hotel Roca Negra de Agaete que explota la cadena Cordial ha reabierto sus puertas con cincuenta habitaciones más. Las obras de renovación que ha llevado a cabo Maurizio Peruzzo, el propietario italiano de este complejo, y que han tenido un coste de 7 millones de euros, han permitido pasar de las 88 unidades alojativas a unas 140, todas con un nuevo diseño. El reto de los gestores era ofrecer la calidad y el servicio que merece un alojamiento de cuatro estrellas, categoría que ya tenía antes, pero que se había descuidado.
La reforma, que comenzó el pasado verano, ha servido también para ubicar el restaurante dentro del mismo edificio, así como la cocina, con el fin de ofrecer una mayor comodidad a los clientes, ya que al estar este servicio en un centro comercial que estaba justo enfrente obligaba a salir del recinto para desayunar o cenar.
También este cambio integral ha llevado aparejado una remodelación del gimnasio y de toda la zona del spa, así como de la piscina. Se ha aprovechado para instalar un chill out en la zona de la terraza, justo al lado del restaurante, lugar que se elige precisamente porque tiene unas preciosas vistas a toda la costa, que se conoce como la cola del dragón.
Quedan todavía algunos detalles por rematar, que se quieren concluir a lo largo de este mes de noviembre, si bien se están haciendo ya con el hotel en explotación.
Nicolás Villalobos, director del grupo Cordial, explicó que la decisión de reformar el Roca Negra se adoptó porque era necesario mejorar el producto, ya que si bien el hotel tenía categoría de cuatro estrellas era algo a nivel administrativo, puesto que en muchos casos no se estaban dando esos servicios que el emplazamiento y el lugar merecían y que por tanto demandaban los visitantes.
Villalobos explicó que en verano, el cliente que más visita este hotel es el turista local, que aprovecha la ubicación en la costa de Agaete, alejado del ruido, y cerca del casco de este municipio para descansar. En invierno son los nórdicos los que eligen este alojamiento. Según comentó el director de Cordial, estos turistas tienen otras preferencias respecto a los que prefieren el sur de Gran Canaria, porque si bien también quieren disfrutar del sol, en realidad es el senderismo o practicar deportes por el Barranco de Agaete o Guayedra lo que prioriza esta elección. Después de los nórdicos son los ingleses y alemanes los turistas que más se decantan por este establecimiento.
El Roca Negra se inauguró en el año 2010. Fue hace 32 años cuando Maurizio Peruzzo, que se enamoró de la zona de Agaete, decidió comprar unos terrenos en los que edificó una urbanización denominada El Turmán, en la cual está ubicada el hotel. Primero fueron sus hijos, Cristina y Massimiliano, los gerentes de la empresa, Erga Gaer SLU, que se hizo cargo del establecimiento, mientras que la empresa RPV Consulting Turístico Internacional, representada por Fernando Muntadas, supervisaba la gestión hotelera del establecimiento.
A raíz de una caída en la ocupación, los propietarios buscaron nuevos gestores y negociaron con la cadena Cordial Hotels la entrada en la gestión del Roca Negra. El hecho de contar con hoteles propios permitió a esta cadena, tal y como destacó el director, lograr muy pronto que los cambios se reflejarán incluso en los comentarios que hacían los turistas en las redes sociales. La frialdad del trato del personal, la calidad de servicio y la alimentación centraban las quejas de los clientes, que según explicó, se cambiaron por elogios a la atención que, entre otras cosas, se espera cuando se acude a este tipo de hoteles.
Negó que la razón por la que se emprende esta renovación haya sido otra vez del descenso en la ocupación. "El hotel estaba lleno, iba muy bien, pero queríamos dar un mejor producto y para eso era imprescindible hacer unos cambios para hacer más cómoda y confortable la estancia", subrayó.
Villalobos destacó que es la estrategia de expansión claramente orientada a la búsqueda permanente de destinos atractivos que proporcionen experiencias vacacionales de calidad a sus huéspedes, la que les anima a asumir a principios de 2017, la gestión integral del Roca Negra, en Agaete, otro destino muy desconocido en general en los grandes mercados turísticos pero que han conseguido posicionar al abrigo de las grandes posibilidades naturales y etnográficas que el noreste de Gran Canaria propone.
