El pleno de Gobierno de Agaete aprobó anoche una propuesta que insta al Gobierno de Canarias como organismo competente a la incoación de un expediente que declare el muelle viejo de Agaete como Bien de Interés Cultural (BIC). La iniciativa, respaldada por los socios de gobierno (PSOE y Nueva Canarias) y por el Partido Popular en la oposición, recoge también que se paralice la ampliación del puerto como "medida cautelar de salvaguarda". Los dos ediles no adscritos y militantes de Coalición Canaria intentaron sin éxito incorporar una enmienda para que dejara fuera esta última propuesta, a pesar de lo cual se abstuvieron.
La zona de influencia del BIC abarcaría desde el viejo muelle hasta la trasera del espigón de protección del puerto exterior, con unos 500 metros de radio, basado en el estudio ambiental del propio Gobierno para el puerto sobre dinámicas de litoral. Y la infraestructura portuaria, cuya construcción se adjudicó en 1875, está incluida en el Catálogo Arquitectónico de Agaete con un grado de protección integral, es de propiedad pública y sobre ella se permite únicamente "la conservación, la restauración y la rehabilitación como tipos de intervención".
Las concejala de Fiestas y Patrimonio Cultura, Isabel del Rosario, defendió que en la zona se han encontrado restos de pecios, fragmentos de cerámicas y anclas de gran antigüedad a profundidades de hasta 40 metros, por lo que es muy posible que si se lleva a cabo una exploración submarina aparezcan más restos de relevancia histórica, ya que la zona servía desde hace siglos de fondeadero para los barcos.
La medida prevé como "medida preventiva" frenar ampliación del puerto. El alcalde, Juan Ramón Martín, aludió que la ejecución del llamado macromuelle tendrá efectos contaminantes y de afección ambiental marina y paisajística, y causaría un desmedido desarrollo urbanístico, además tensar la convivencia ciudadana actualmente.
Los dos concejales no adscritos Carlos Álamo y Javier Gil presentaron una enmienda que fue rechazada para sacar de esa votación plenaria la ampliación portuaria, al entender que la petición del BIC "enmascara" el interés por frenar la ampliación del puerto, cuestionando también la existencia en el fondo marino de vestigios de interés.
La iniciativa salió adelante con los votos de los socios de gobierno municipal (PSOE y NC), y del PP en la oposición, absteniéndose los citados ediles, que sí veían el interés de proteger el viejo muelle.
El expediente para su incoación como BIC pasa ahora a manos del Gobierno de Canarias, que es responsables a su vez de la obra de ampliación del puerto.
La propuesta municipal recopila que "en 1481 el Puerto de Las Nieves comienza su historia como ensenada natural de la Conquista de la parte norte de la Isla, vinculado al proceso de construcción de la torre fortaleza de Agaete. Posteriormente con el comercio del azúcar fue puerto de conexión con los mercados del norte de Europa, especialmente con Holanda, además de fondeadero de los barcos que comerciaban con Tenerife. El 9 de noviembre de 1864 el Ministerio de Fomento aprobó la construcción del muelle de Las Nieves, según proyecto del ingeniero Juan de León y Castillo. La obra se sacó a subasta en 1875 por 105.000 pesetas, adjudicándose al contratista de la Villa Antonio de Armas, que la llevaría a buen término. La construcción del nuevo muelle, que venía a sustituir al antiguo de 120 varas de largo que existía según consta hasta 1862, está vinculado al proceso de construcción de la carretera general del norte hasta Las Nieves."
Además, el expediente recuerda que en Agaete "existen yacimientos prehispánicos". Y que, finalizada la Conquista, a partir del siglo XVI, adquiere importancia como lugar de embarque y comercio hacia Europa de la producción agrícola y azucarera".
