La búsqueda de la empresaria desaparecida hace dos años Juana Ramos se ralentiza por la acumulación de barro y agua dentro del pozo en el que se están centrando los trabajos, situado entre los barrancos que unen los barrios de Cambalud, El Trapiche y Lomo Quintanilla, de Arucas, y Los Dolores de Firgas. Las malas condiciones del mar impiden que la lancha neumática pueda lanzarse al agua para tratar de abrir una nueva alternativa de localización en el mar.

La campaña en busca de Juana Ramos alcanza su tercera jornada. La Unidad Militar de Emergencias (UME) volvió a concentrar el miércoles su operativo en torno a este depósito de agua que, según los datos del Cabildo de Gran Canaria, alcanza una profundidad de 72 metros. Los trabajos se iniciaron en este punto el lunes, y todavía ayer miércoles se estaba intentando llegar al fondo para tratar aclarar si existen restos humanos. Los expertos realizaron sin éxito algún intento. A pesar de todo, se espera alcanzar el objetivo y rematar el trabajo.

La intervención está chocando de momento con la presencia de un gran volumen de fango y de agua, así como restos de los pozos negros situados a escasos metros. El dispositivo militar contó con el apoyo de una unidad de la Policía Nacional especializada en los trabajos en subsuelo.

Al mismo tiempo que un equipo realizaba esta inspección, otro grupo de militares continuaba durante la jornada de ayer cortando las cañas situadas a su alrededor, con la misma finalidad de hallar posibles restos de la comerciante desaparecida. E integrantes de las unidades caninas de la policía y de la UME rastrearon con perros las lomas próximas.

Como ha informado este periódico, la búsqueda de Juana Ramos ha tenido tres grandes momentos. Tras su desaparición, los investigadores se concentraron en buscar pistas en la costa de Arucas, desde la Granja del Cabildo a Las Salinas, Punta de los Palomares y El Guincho, hasta Bañaderos y El Puertillo.

La segunda batida emprendida en junio del año pasado se focalizó en pozos y en la zona del Barranco de Moya, pero también sin alcanzar el objetivo deseado.

Y este es el tercer gran operativo. Se inicia a instancias de la magistrada titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, Auxiliadora Díaz, tras recibir una nueva pista. Un informe del grupo de Homicidios de la Policía Nacional basado en la geolocalización ha detectado un nuevo punto físico en el que los teléfonos móviles de la desaparecida, que ahora tendría 60 años, y de su supuesto homicida y expareja, Miguel Ramos, coinciden la noche del 20 y 21 de agosto de 2016, en el que se perdió la pista de la mujer. Es en este área de influencia donde ahora la UME está priorizando el rastreo, que se está acometiendo por tierra, por vía aérea con la presencia de drones y en agua, ya que submarinistas han estado inspeccionando el interior de estanques y de pozos, a la espera de continuar en el mar, si continúa sin alcanzarse los resultados deseados.

Fotos de los días anteriores de búsqueda: