La central hidroeléctrica Chira-Soria es el primer proyecto de instalación industrial en Canarias que se va a construir con la tecnología virtual en cinco dimensiones. Se trata de añadir a las tres medidas: alto, bajo y ancho, los conceptos de tiempo y coste, método que también se ha empleado para el diseño de ese complejo energético. Red Eléctrica de España (REE) ha decidido utilizar los últimos avances de esta metodología, que en inglés se conoce como VDC, porque en lugar de ver el proyecto en una maqueta y corregir después los diversos imprevistos que surjan durante las obras, se puede recrear con antelación cómo va a funcionar esta infraestructura, en su mayor parte bajo tierra, cómo se va montando cada parte y, además, hacer los ajustes que hagan falta en cualquier elemento de todo el entramado que va a permitir bombear agua desde la presa de Soria a la de Chira, y utilizarla luego para producir electricidad dejándola caer desde la de Chira a la de Soria cuando convenga al sistema eléctrico insular.
La ejecución de este proyecto, que supone una inversión superior a los 300 millones de euros, y cuyas obras se van a alargar por un periodo de cinco años, está a la espera del informe de Declaración de Impacto Medioambiental que tiene que resolver el Gobierno canario. Superado este trámite administrativo, la empresa deberá sacar a licitación pública la ejecución de la obra, lo que supone que hay que apurar los plazos para que la construcción se inicie en 2020.
Según explicó Daniel Pérez, director de Infraestructuras en Canarias de Red Eléctrica, el primer diseño se ha retocado porque se han tenido en cuenta las recomendaciones aportadas por los estudios geológicos y geotécnicos del suelo que recorre el espacio de Chira a Soria, junto a las propuestas realizadas por el Cabildo de Gran Canaria, el Gobierno canario y los Ayuntamientos de San Bartolomé de Tirajana y Mogán durante el periodo de exposición pública.
Los últimos estudios geotécnicos y geológicos han aconsejado mover la ubicación de las cavernas en las que se instalarán las turbinas, que estarán a unos 400 metros de profundidad, hacia la zona de la presa de Chira, y también hacia este lugar se tendrá que desplazar todo el entramado del vaso sobre el que se verterá el agua para generar electricidad. En ambos casos se van a mover las instalaciones en unos 500 metros desde Soria, en Mogán , hacia la localidad Lomo de Pedro Afonso, en San Bartolomé de Tirajana. Las cavernas en las que van las turbinas, que en la imagen aparecen en color negro, permiten albergar un edificio del tamaño de la catedral de Santa Ana, de la capital grancanaria.
La central contará con una potencia de turbinación de 200 MW (en torno al 36% de la punta máxima de demanda actual de la isla), lo que permitirá mejorar la garantía del suministro eléctrico de Gran Canaria. Una de las ventajas del sistema de bombeo es que permite almacenar los excedentes de generación renovable que no se pueden integrar en el sistema eléctrico cuando hay exceso de producción de esta energía.
Aprovechar la renovable
El director de Infraestructuras en Canarias de Red Eléctrica apuntó a este respecto que esto permite que se pueda aprovechar la renovable en los momentos de menor producción. Añadió que este tipo de instalaciones hidroeléctricas pueden funcionar en dos modos diferentes: bombeo y turbinación. En modo bombeo, el agua se lleva desde el embalse inferior al superior. En este proceso de bombeo se absorbe energía eléctrica de la red que queda almacenada en forma de energía potencial en el embalse superior. En modo turbinación, se lleva el agua desde el embalse superior al inferior, devolviendo a la red la energía previamente almacenada durante el modo bombeo.
Además, la empresa, dado que Gran Canaria como cualquier isla tiene un sistema energético aislado, se marcó como objetivo en el diseño de Chira-Soria que cumpliera con la integración de las renovables, la seguridad del sistema y la garantía del suministro.
Daniel Pérez insistió en que la tecnología en cinco dimensiones permite optimizar el proceso de diseño y construcción así como los recursos materiales y humanos. Destacó que con esta metodologia se pueden detectar las posibles complicaciones en la fase de diseño, lo que favorece la eliminación de las desviaciones que pueden surgir en el plazo de ejecución de la obra, y en los costes estimados para realizar la obra.
Puso como ejemplo que si un ingeniero se da cuenta de que hay que hacer modificaciones en el trazado de un túnel que va bajo tierra lo puede decidir con celeridad porque "cualquier interferencia salta enseguida, ya que afecta al resto del entramado".
Añadió que este método agiliza la toma de decisiones al involucrar a todos los agentes, permitiendo obtener soluciones consensuadas. En este sentido, añadió que el hecho de que se pueda ver de forma virtual cómo encaja cada tubo o cúal sobresale supone no sólo que la central se va aconstruir con precisión sino que de cara al futuro mantenimiento se podrán hacer maniobras sin que haya riesgos para los trabajadores. "Se podrán ensayar una y mil veces todas las operaciones sin que eso conlleve ningún tipo de riesgo", subrayó el director de Infraestructuras de Red Eléctrica en Canarias.
Concluyó que también Red Eléctrica ha tenido en cuenta al afrontar el diseño y la inversión en esta infraestructura eléctrica que la tecnología sea compatible con los últimos avances en inteligencia artificial, y el Internet de las cosas, que hace referencia a que los aparatos están todos interconectados. La idea es estar preparados para los nuevos avances. "Hoy día, en estos sistemas de producción, o dispones de tecnologia puntera o te quedas atrás." remarcó.
