El Gobierno de Canarias y el Ayuntamiento de Moya entregarán en un mes 38 viviendas de protección oficial en régimen de alquiler, según anunció el presidente del Ejecutivo, Fernando Clavijo, y el alcalde de la localidad norteña, Hipólito Suárez, en una visita girada por el primero a pie de obra.

Según explica el primer edil de la villa, se trata de un conjunto de casas que quedaron sin terminar durante la crisis, por la quiebra de la constructora y que se ubican a cinco minutos en coche del centro urbano de Moya, entre los barrios de Trujillo y Frontón.

Ya en 2016, recién iniciada la presidencia de Clavijo y en la primera visita institucional a la localidad, Suárez le plantea la posibilidad de rescatar aquella infraestructura sin finalizar para entregarla a los demandantes de vivienda del Gobierno de Canarias, "en un proceso que ha durado cuatro años y que finalizará en las próximas semanas con la terminación de las cocinas", que es la última fase de un recorrido en el que han intervenido tanto los técnicos de Visocan como del Ayuntamiento.

En este sentido el alcalde de Moya subraya el papel que ha desempeñado en el proyecto la titular de Vivienda, Cristina Valido, en un trabajo conjunto que permitió la adquisición el pasado año del edificio El Laurel, que es como se denomina, lo que ha supuesto una inversión de unos dos millones de euros entre los que se incluye el acabado y el equipamiento.

Las unidades disponen de diferentes tamaños de superficies, de dos o tres dormitorios, algunos dúplex, por lo que variarán en los precios de los alquileres sociales en razón de los metros cuadrados. Suárez calcula que en cuatro semanas comenzarán a ser ocupados por los inscritos en la lista de demandantes del Ejecutivo autónomo.

Por su parte, Clavijo afirmaba ayer en Moya que "con estas viviendas, se amplía el número de casas que el Gobierno pone a disposición de las familias que más lo necesitan en el municipio, permitiéndoles acceder a un alquiler que se ajusta a su situación económica y social".

En términos regionales, para el presidente del Gobierno, "Canarias ha realizado considerables esfuerzos en materia de vivienda, como ha sido el impulso del nuevo Plan de Viviendas de Canarias que regulará las políticas de esta área para el periodo comprendido entre 2019-2022 y que acaba de ser validado por unanimidad por los agentes sociales".

Cristina Valido aportaba los números, cifrando en 18.470 las familias canarias, "que residen en viviendas sociales, es decir, familias que cuentan con ayudas al alquiler, de las cuales, 14.234 familias residen en viviendas del parque público de viviendas del Instituto Canario de la Vivienda y 4.527 familias en viviendas gestionadas por Visocan y que, igualmente, reciben ayudas para alquiler".

A estas 4.527 familias que residen en viviendas de Visocan, según los datos que aporta el ejecutivo en un comunicado, se suman un conjunto de 847 familias que cuentan con una vivienda de protección oficial en régimen de alquiler con rentas más bajas que el precio del mercado, a las que hay que sumar las 38 nuevas viviendas que la empresa pública gestionará durante un periodo de tres años en Moya.

Hay que indicar que para acceder a estos beneficios, los solicitantes deben de estar registrados como tales en el Registro Público de Demandantes de Viviendas de Canarias.

Con esta actuación se cumple un proyecto del grupo de gobierno del Partido Popular en Moya, que preside Hipólito Suárez, al que suma los aprobados mediante las enmiendas incluidas en los presupuestos regionales tanto de 2018 como de 2019.

Suárez enumera la próxima rehabilitación del casco histórico de Fontanales; la terminación del pabellón deportivo del instituto Doramas; la mejora del entorno de El Charco de San Lorenzo; la creación de un área recreativa y deportiva en Trujillo; y la rehabilitación del mirador de la plaza de La Concordia, cuyo contrato de adjudicación se firma este miércoles para comenzar estas obras en breve plazo.

El alcalde afirma que en conjunto, incluyendo las citadas viviendas de El Laurel, se trata de una inversión de cuatro millones de euros para Moya.