¿Cómo valora la concesión el Roque Nublo Deportivo por el Cabildo de Gran Canaria?
Me siento agradecida de que la institución más importante de Gran Canaria me conceda este premio, aunque también agradezco el apoyo y el cariño que me han brindado otras personas. Siempre me han tratado con respeto y me han dado muchas oportunidades para sentirme como la persona que hoy en día me siento. Y algo también muy importante, el orgullo de darme la oportunidad de que yo me pueda expresar como soy, de llegar a muchísimas personas, no solo de Canarias, sino de España, dando mi voz a lo que represento, dejando bien claro que soy de aquí y he logrado poner mi voz y el nombre de Canarias por todo el mundo.
Usted, además del Roque Nublo, ha recibido varios reconocimientos públicos.
He tenido tantos premios que me sienta un poco cotidiano, pero no significa que me parezca menos reconocido o significativo para mí. La verdad es que de tantas cosas y oportunidades que he tenido estos dos años, cada vez que me conceden algo nuevo me lo tomo con muchísima ilusión y un nuevo reto y estoy muy agradecida. También al voley, que bajo mi punto de vista no está reconocido, acabamos de ser anfitrionas de la Copa de la Reina y ha salido bastante bien, aunque no superamos el primer partido. Se ha ofrecido un buen voley y estoy muy orgullosa y satisfecha, más no puedo pedir.
Hace hoy un año [ayer para el lector] que debutó en la Superliga femenina de voley. ¿Qué recuerda de ese día?
Me recuerdo como una chica a la que le sucedieron muchas cosas tan rápidas, que iba muy lanzada, muy de cabeza. Me hizo sentir como quien ha dado un gran paso, que en vez de subir un escalón normal subí una grada completa. Llegaron cosas que no tenía en mente poder conseguir porque soy una persona que siempre tiene claro lo que quiere lograr que cuando llegó, me gustó y me quedé. Siempre es bueno aspirar a más, quiero evolucionar como jugadora, que me queda muchísimo, pero para mí la verdad es que no fue muy raro porque tenía ganas y sabía que podía conseguirlo. Estoy muy agradecida a todo el equipo, el club, los entrenadores, porque ha sido un paso importante para mí y para muchas personas.
¿Era consciente de que al debutar en la Superliga sería un referente deportivo y también de la lucha por la igualdad?
Sí, pero más bien por las terceras personas que me rodean porque yo soy una chica bastante normal, se me va la cabeza en muchísimos aspectos y a veces no me pongo centrada en decir mira todo lo que has hecho. Para mí es algo cotidiano porque nunca me he impuesto condicionamientos para hacer cosas, como deportista he trabajado para lograrlo. Luego están las personas que piensan sobre mi identidad sexual, pero siempre he vivido muy normal mi transexualidad, nunca he tenido en mi mente la etiqueta de chica trans, sino de una chica completamente normal. He tenido problemas burocráticos, pero siempre los he podido llevar bien. Desde una corta edad empecé mi lucha y siempre he tenido claro que es un proceso muy largo, me ha angustiado en grandes aspectos de mi vida, pero me han hecho ser la persona que soy y no me arrepiento.
Hace un año tuvo que ser para usted una experiencia convertirse en el centro de los medios de comunicación por su debut.
Sí, pero no por el hecho, sino porque lo que leía no era todo lo que tenía que aportar. Se centraron en el hecho, no en la circunstancia, fue más el titular 'una chica trans logra debutar en la Superliga', pero lo que más me fastidiaba era que querían conocer mi etapa anterior que en lo del deporte. Me fastidia muchísimo porque los logros que tengo es por ser deportista, la gente no logra comprender que la transexualidad es algo muy normal. Son dos grandes temas, el deportivo y el de la sexualidad que han terminado entrejuntándose y tengo que lidiar con ellos, pero hay que tener mucha responsabilidad, porque no solo soy representante de un colectivo, sino también de un equipo deportivo y muchísimos niños quieren lograr lo mismo que tú, que están luchando con problemas burocráticos que es vital para ellos. No soy abanderada del colectivo, lo único que yo abandero es que cada uno luche por lo que quiere ser.
Septiembre de 2017 tuvo que ser duro para usted, cuando un juzgado de Telde tuvo que decidir si podía jugar como mujer.
Es algo complicado porque al fin y al cabo tú puedes tener bien clara tu identidad, pero vayas donde vayas va a estar contigo cuando estás sentada para hacerte una analítica o buscar notas del colegio porque al fin y al cabo son estos pequeños impedimentos lo que le hacen a la gente girar la cabeza y decir y esto qué es. Creo que es un tema que habría que tratarse con muchísima más normalidad y dar más recursos para evitar que la persona se sienta mal consigo misma, sino su familia y en la sociedad.
Decía hace un año que le habían hecho sentirse como un bicho raro. ¿Lo ha superado?
No era eso. Sencillamente que estaba en un bucle en el que la gente se volcaba en decirme que tenía lo que tenía por ser quien eres, estás jugando en la Superliga por lo que eres y con eso me he tenido que cruzar en muchísimo tiempo. Debo tener bastante claro que mi transexualidad me va a acompañar toda la vida y si me quiero dedicar profesionalmente al voleiboln, si lo hago bastante bien va a ser en este aspecto el que voy a estar arrastrando. La gente habla lo que no entiende y no comprende: que nosotros también tenemos sueños. Ahora me siento cómoda y relajada, pero si quiero aspirar a muchísimo más tendré que tener mucho más cuidado, tendré que centrarme más porque no solo es jugar, sino también llevar un nombre detrás.
