Un año más, las mujeres estuvieron en minoría en el escenario del acto institucional del Cabildo. Quizá por eso los mayores aplausos fueron para las Kellys y para Omi Perdomo, la primera deportista tránsgenero en debutar en la élite del voleibol. El jurado de los Honores y Distinciones, formado por representantes de todos los grupos políticos de la corporación, tuvo este año más dificultades de las normales para llegar a la unanimidad sobre los 22 premiados, incluso con un amago de romper el consenso porque un partido quiso aumentar el número, pero nadie cayó en la cuenta de que entre los diez principales reconocimientos, los Hijos y los Canes, solo había una mujer, la ingeniera espacial Tatiana Mar Vaquero. Emilio González Déniz, en el discurso en nombre de los premiados, se refirió a la necesidad de dar más protagonismo a las mujeres.
Nadie discutirá los méritos de los otros nueve galardonados, pero no es creíble que en "la isla de las oportunidades", como reza el eslogan repetido en los vídeos de la gala, no haya más mujeres que puedan ser nombradas como Hijas Predilectas y Adoptivas, o Can de las Artes y las Ciencias.
La propia consejera de Igual- dad del gobierno insular, María Nebot, reconoció el error y en Debate del Estado de la Isla presentó, al igual que el grupo Podemos, una propuesta para acabar de una vez con esta discriminación. Ambas fueron aprobadas, aunque no por unanimidad, cosas de la política en vísperas electorales.
Invitados
El último acto de Honores y Distinciones de este mandato congregó a más público que en años anteriores, también cosas de la cercanía de las urnas, y en la primera fila estuvieron dos expresidentes del Gobierno de Canarias, Jerónimo Saavedra y Román Rodríguez, junto a la presidenta del Parlamento regional, Carolina Darias, y al alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo.
El Ejecutivo regional estuvo representado por el consejero de Sanidad, Rafael Baltar. Y como en años anteriores, poco o nula presencia de representantes de las organizaciones empresariales. El obispo Francisco Cases, las autoridades militares, los consejeros del Cabildo y los alcaldes, no todos, completaron las primeras filas de invitados.
Hubo momentos para la emoción, como cuando el presidente Antonio Morales entregó el premio de su amigo Antonio Lozano a su viuda, Clara Herrera. También para las risas, cuando Saavedra apareció en un vídeo para resaltar las virtudes de Salvador García Carrillo y le definió como "gran sindicalista, socialista leal, muy crítico y algo mimoso".
Grandes aplausos recibieron también los dos fundadores de Ascan, Luis García-Correa y Servando López, que pese a rondar los 90 años se movieron con gran soltura por el escenario. Las labores humanitarias de Sitapha Savané en África y de Manuel Roales en la India obtuvieron el calor del público al recoger sus títulos. Aunque la presencia de mujeres queda como asignatura pendiente, sí se premió la lucha por la igualdad de géneros en los galardones a Omy Perdomo y al Colectivo Gamá.
El acto concluyó con un concierto de siete temas, Gran Canaria y Sombra del Nublo incluidas. En 2019 se esperan más mujeres en el escenario.
