Los ocho partido presentes en la corporación de la Villa de Santa Brígida han decidido hacer frente al último pago de la indemnización a la constructora del centro comercial y de ocio, conocido popularmente como el 'mamotreto', aprobando por unanimidad en el pleno una modificación de suplemento de crédito de remanente de cinco millones de euros. La cantidad que falta por pagar asciende a 5,6 millones de euros y se pagará de forma fraccionada.
De esta forma se pretende garantizar el pago de la sentencia que permitirá al municipio recuperar la concesión sobre la parcela y las obras ejecutadas. El Tribunal Superior de Justicia de Canarias condenó al Ayuntamiento por lo hecho por las corporaciones anteriores gobernadas con mayoría por el Partido Popular ya que la unión temporal de empresas se sintió perjudicada por las paralizaciones continuas de la obra que, 17 años después, sigue inconclusa en mitad del casco urbano de la villa.
El alcalde satauteño, José Armengol, explicó que el dinero consignado servirá para afrontar la sentencia, si bien añadió que se estudia el procedimiento con la Tesorería municipal y el fraccionamiento de la deuda. El grupo de gobierno actual quiso arreglar el pleito con la empresa FCC, que lidera la UTE, pero como no llegaron a acuerdos en todos los puntos, el asunto acabó en los tribunales, que dieron parcialmente la razón a las dos partes.
Fin del proceso judicial
La asignación de remanentes para el pago de la sentencia del 'mamotreto' permite la disponibilidad de fondos para pagar la sentencia de 5,6 millones de euros que cierra el proceso judicial. Ello permitirá recuperar la parcela en cuanto haya un acuerdo sobre el posible fraccionamiento del pago, según comentó el alcalde.
Todos los grupos políticos representados en la corporación dieron su voto afirmativo a este expediente de modificación de suplemento de crédito de remanente.
El Ayuntamiento de Santa Brígida se ha congratulado de la iniciativa de un taller de urbanismo participativo que pone al centro comercial de la villa satauteña, conocido popularmente como el 'mamotreto' o la 'mole', como caso práctico para buscar alternativas viables y sostenibles.
El 'mamotreto' servirá como ejemplo para explicar y formar sobre cómo puede participar la ciudadanía en un asunto urbanístico de interés para la comunidad. La actuación urbanística en la parcela del 'mamotreto' ha ocasionado enormes pérdidas económicas y un parón en el desarrollo del municipio desde hace tres lustros.
El Ayuntamiento quiere que la ciudadanía pueda intervenir en las decisiones y no quedar al margen en un parcela de titularidad municipal que ha sido recuperada tras casi veinte años de conflicto y pérdidas millonarias.
