Ibarra esperará a que Morales tome la iniciativa para ver los apoyos de ambos

Ya no es un secreto que el PP, Unidos-CC y Ciudadanos rechazan la continuidad de Morales al frente del Cabildo y que prefieren que sea Ibarra el que asuma la Presidencia, incluso con un gobierno en solitario, por lo que todo depende de lo que hagan los socialistas en el embrollo de los pactos en el Gobierno de Canarias, el resto de los cabildos y los municipios, con el sábado 15 de mayo como primera fecha clave en la constitución de los ayuntamientos.

También es conocido que el candidato del PSOE pretende ser presidente del Cabildo y que ya tendría apalabrados los apoyos necesarios, salvo el de su propio partido, que depende de cómo se desarrollen las negociaciones para que Ángel Víctor Torres lidere el Ejecutivo autonómico.

Ibarra y los dirigentes del PSOE que le respaldan en el intento de desbancar a Morales dudan "del progresismo de NC" ante algunos desplantes recientes a Pedro Sánchez en las Cortes y recuerdan "sus traiciones" en el pasado, desde la moción de censura de 1991 en el propio Cabildo para desbancar a Carmelo Artiles. En aquella ocasión fue Morales, entonces consejero de ICAN, el que votó junto al PP y al CDS para defenestrar a Artiles, que había ganado las elecciones con una amplía ventaja de 14 consejeros.

El grupo de Podemos sí respaldaría a Morales a cambio de la entrada de sus dos consejeras en el gobierno insular, pero sus votos no serían necesarios en un pacto NC-PSOE y tampoco servirían para nada si los socialistas se desmarcan y buscan otras alianzas con PP, Ciudadanos o Unidos-CC.

Morales y la dirección de NC no han realizado ninguna llamada para iniciar conversaciones oficiales sobre el Cabildo, según confirmaron ayer los candidatos de los otros partidos, quienes coincidieron en que "habrá que esperar" a que avancen las negociaciones sobre el Gobierno regional y los ayuntamientos.

Si se impone la tesis de un pacto en cascada para formar gobiernos progresistas allí donde sea posible, Morales contaría con los ocho votos del PSOE y ya tendría asegurada la mayoría de 16. En ese caso, es improbable que los socialistas acepten la entrada de Podemos en el gobierno, pues serían más áreas a repartir entre tres grupos.

En la hipótesis de que Ibarra no aceptara un pacto en cascada con NC, los socialistas aún tendrían la alternativa de proponerle otro destino en el Gobierno de Canarias, en la administración del Estado e incluso volver a la Autoridad Portuaria de Las Palmas. Igualmente, si se produjera una ruptura del acuerdo entre ambos partidos en el Cabildo y se presentara una moción de censura contra Morales, éste podría recalar en uno de los puestos reservados a NC en ese hipotético Gobierno regional de Ángel Víctor Torres.

Ayuntamientos

La misma incertidumbre se produce en aquellos ayuntamientos grancanarios donde es necesario un pacto para gobernar, en algunos entre tres o más organizaciones políticas. Al respecto, uno de los negociadores ironizó ayer sobre "las carreras" en aquellos municipios donde los dirigentes locales quieren desligarse de los acuerdos en cascada del Cabildo y del Gobierno de Canarias.

Si el próximo 15 de junio se confirman algunos de los pactos municipales contra natura que se están barajando, podrían hacer saltar por los aires todo lo acordado hasta entonces para el resto de los instituciones. La paradoja, comentó este dirigente, es que se han empezado las negociaciones por el Gobierno de Canarias, cuando debería ser por los ayuntamientos y los cabildos porque se constituyen antes.

En Telde, donde se explora un gobierno entre PSOE, CC y Ciuca para dar la Alcaldía al socialista Alejandro Ramos, ayer se conoció que este último se reunió el domingo con la regidora saliente, Carmen Hernández, de NC, para intentar aplicar el pacto en cascada en el municipio. Según fuentes socialistas, Ramos trasladó a Hernández que aún existe "desconfianza" hacia ella por lo ocurrido en el anterior mandato.

Por su parte, fuentes de NC comunicaron que ambos "mantuvieron una conversación cordial y distendida sobre el presente y el futuro de la ciudad", donde Hernández le expresó la predisposición de su partido "a llegar a un acuerdo de progreso para garantizar la estabilidad y la gobernabilidad de la ciudad".

Así, Hernández interpreta que "el hecho de que las dos fuerzas hayan obtenido en las pasadas elecciones una mayoría de gobierno es un mensaje claro de que esa es la primera opción de la ciudadanía". En cualquier caso, NC, como opción más votada, "está obligada a mantener diálogos con el resto de las fuerzas que han obtenido representación plenaria, lo que se producirá en los próximos días". NC y PSOE se han emplazado para continuar hablando durante este semana.

San Bartolomé

El PSOE de San Bartolomé de Tirajana, que fue la segunda fuerza más votada en las elecciones del pasado 26 de mayo, sigue decidido a propiciar un acuerdo de gobierno progresista que incluya a NC y a CC. "No me voy a sentar con Agrupación de Vecinos-PP", sentenció la concejala electa de los socialistas para liderar esa corporación, Conchi Narváez.

La suma de estas fuerzas darían una amplia mayoría con un total de 16 representantes, ya que el PSOE obtuvo siete, NC cinco y CC otros cuatro; es decir, el doble que los alcanzó en esta convocatoria AV-PP. La mayoría absoluta se consigue con 13 ediles ya que la corporación está formada por 25 concejales

Narváez aseguró que este pacto para gobernar San Bartolomé de Tirajana los próximos cuatro años no está a expensas de cómo se resuelva el acuerdo en el Cabildo de Gran Canaria. "No estoy esperando a que se cierren las negociaciones en el Cabildo porque aquí las decisiones se están tomando a nivel local", apuntó.

También explicó que ha quedado con los representantes de esas dos fuerzas políticas para intercambiarse los distintos programas de gobierno y conocer cuáles son las líneas y actuaciones en las que quieren basar la gestión municipal este próximo mandato. "Hay que saber para qué queremos gobernar San Bartolomé de Tirajana", añadió la concejala socialista.

Por su parte, Samuel Henríquez, candidato electo por Nueva Canarias, también defendió la necesidad de que haya un cambio de siglas en la corporación de Tunte, que ha estado en manos de AV-PP los últimos ocho años.

Henríquez apuntó que en la reunión que mantuvieron la semana pasada con Narváez acordaron intercambiarse los programas de gobierno antes de volver a mantener otro encuentro. Desde NC aseguraron que han mantenido encuentros también con Coalición Canaria, mientras que con otros grupos se han limitado a contactar a través de llamadas de teléfono.

Por su parte, Inés Rodríguez, edil electa por Ciudadanos, comentó que sólo se han visto con los líderes de las formaciones más votadas, pero no han llegado a compromisos porque están a la espera de recibir instrucciones de la dirección. Ciudadanos es la llave en varios pactos.