La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Gáldar

Un hotel de histórica realeza

El primer hotel de Gáldar abre sus puertas con un estilo que respeta el pasado de su emblemático edificio l Tiene 20 habitaciones, restaurante y terraza 'chill out'

57

El hotel emblemático Agáldar abre sus puertas al público

El emblemático Hotel Agáldar fue ayer inaugurado después de tres años de trabajos en un evento al que acudieron cientos de personas. Aunque el recinto abrirá sus puertas dentro de unos meses ya que todavía se encuentra sin fecha de apertura, hoy vecinos y curiosos podrán cotillear el interior del primer hotel municipal gracias a una jornada de puertas abiertas que tendrá lugar de 10.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 19.00. Está situado en pleno casco histórico de la ciudad, junto a la Iglesia de Santiago y a escasos metros de las Casas Consistoriales, Cueva Pintada y otros lugares de gran interés que muestran la historia de Gáldar, o como era conocida antiguamente 'Agáldar', nombre con el que lo han bautizado.

El edificio albergaba dentro de sus paredes el colegio religioso Jesús Sacramentado, pero no es la primera vez que tiene el uso de hotel ya que en 1896 ejercía de sucursal del Hotel Santa Catalina y finalmente fue adquirido por la Gran Canary Island Co. Ltd.. Por tanto, por el umbral del famoso edificio han pasado muchas personas y de distintas épocas. Haciendo honor a su historia, durante la remodelación del interior se encontraron restos de enterramientos en fosas funerarias, por lo que las obras fueron paralizadas y el proyecto se retrasó un año. En un principio Agáldar tenía previsto abrir sus puertas en el pasado 2018.

La estructura del recinto es la misma que la del antiguo colegio ya que la idea del proyecto era respetar al máximo el edificio, cambiando sólo lo que era estrictamente necesario por motivos de seguridad. Lo único que se ha reemplazado han sido los techos y las escaleras que conectan el segundo piso con la terraza.

Habitaciones de estilo inglés

La decoración del hotel ha sido minuciosa y con un claro objetivo de respetar la historia, por lo que en sus habitaciones se aprecia un estilo inglés de época. En las paredes se observan diseños que recuerdan a las antiguas habitaciones de palacio inglés, que se complementan perfectamente con los armarios al descubierto y los baños, dándole un toque más moderno. La decoración es muy cuidada y trabajada. Cada habitación tiene una decoración diferente, lo que hace que al entrar en ellas el visitante se transporte a otro mundo, uno en el que sólo hay calma y armonía. "Para conseguir esto fue complicado encontrar el equilibrio durante el proceso de decoración", explicó Rafael del Castillo, diseñador.

El hotel posee un restaurante en la planta baja, en la que se pueden apreciar algunos de los restos encontrados durante la remodelación, cosa que permite que los visitantes se acerquen un poco más a la historia de este simbólico lugar. En la tercera planta cuenta con una pequeña piscina y una zona 'chill out' con hamacas y una pequeña terraza al aire libre, un lugar que permite a las personas que lo visiten relajarse, mientras observan el casco de la ciudad, dentro de un edificio histórico, algo paradójico.

Estos servicios podrán disfrutarlos tanto residentes del hotel como ciudadanos, ya que al ser un edificio municipal puede entrar cualquier persona que quiera disfrutar de una comida en el restaurante o si, por el contrario, prefiere tomarse algo en la tercera planta mientras observa las vistas. Todo ello, junto con las 20 habitaciones, conforman un destino bastante curioso: "Esto es un hotel de altura", resalta Teodoro Sosa, alcalde del municipio que ayer inauguró el recinto junto con Antonio Morales, presidente del Cabildo, y el Director y Gerente de la empresa Broncemar Beach, empresa adjudicataria de la gestión durante 15 años.

La singularidad del lugar es tanta que la empresa adjudicataria ya ha recibido varias peticiones de hospedaje a pesar de que todavía no hay fecha oficial de apertura. "Todo el proyecto, desde la estructura, el diseño y la esencia del hotel han sido muy cuidados y estos detalles hacen que sea más especial", agrega Vanesa Jiménez, gerente de adjudicación.

Entre tantos guiños a su historia tiene una mención especial el símbolo del hotel, un anagrama formado por una H acompañado por una corona, de manera que combinadas forman una A. De esta manera se utiliza el pasado de la Real Ciudad de Gáldar y se convierte en presente.

"Es una de las obras que con más cariño vamos a dejar. Todo el mundo sabía que era necesario un hotel en Gáldar", añadió Teodoro Sosa. Con este anhelo en mente el Ayuntamiento de Gáldar tomó la iniciativa para solventar este problema y comenzaron a redactar el proyecto, a buscar la financiación y tres años después el trabajo ha dado sus frutos.

Este hotel ha sido sido posible gracias a la colaboración de diferentes entidades. "Es oportuno recordar que esta importante inversión de un millón y medio de euros ha sido gracias a la colaboración institucional, 500.000 euros del FDCAN (Fondo de Desarrollo de Canarias), 500.000 euros del Plan de Cooperación del Cabildo de Gran Canaria y 500.000 euros aportados con fondos propios de nuesto Ayuntamiento", relató Sosa durante el discurso de inauguración.

El Consistorio tomó la iniciativa a la hora de crear, en este caso reformar, un edificio ya existente y de gran valor para los habitantes de Gáldar, porque ninguna empresa privada iba a dar el primer paso. "Si la iniciativa privada no llega, la tomamos nosotros", sentenció Sosa.

Compartir el artículo

stats