Los padres de Yeremi Vargas, que se encuentra desaparecido desde el 10 de marzo de 2007 y que ayer jueves día 18 de julio de 2019 cumpliría 20 años, solicitarán que se reabra el procedimiento porque consideran que hay diligencias que no se hicieron o que no se practicaron. Asimismo, pedirán que no sea el último juez que se hizo cargo de este caso y que lo archivó en octubre de 2017, Juan Manuel Hermo, titular del Juzgado de Primera Instancia número 2 de San Bartolomé de Tirajana, el que lo lleve otra vez sino que sea otro magistrado en la reapertura del mismo.
El objetivo de los familiares es que este caso pase de ser considerado una desaparición al de un asesinato por las pruebas y declaraciones existentes en la investigación realizada hasta ahora. También pretenden que las investigaciones se retomen en la línea que sugería la Guardia Civil, con Antonio Ojeda, alias El Rubio, como sospechoso y que sea juzgado.
Para ello, la familia Suárez-Vargas contrató al abogado Marcos García Montes, que fue muy conocido en España en las décadas de los años 80 y 90 por casos mediáticos y por haber defendido a numerosos famosos, y por ejemplo por llevar la defensa de José María Ruiz-Mateos, en el caso Rumasa, o el de Rocío Wanninkhof, joven que fue asesinada.
El letrado Marcos García Montes, acompañado por la madre de Yeremi, Ithaisa Suárez, del padre, Jonathan Vargas y del abuelo, José Suárez, explicó ayer durante una rueda de prensa en un hotel de Vecindario, en el municipio de Santa Lucía de Tirajana, que en el próximo mes de septiembre presentará una serie de iniciativas y un escrito con las mencionadas peticiones ante el Juzgado de Primera Instancia número 2 de San Bartolomé de Tirajana.
García Montes calificó como "coherente, rigurosa, intangible y seria" la investigación de la UCO (Unidad Central Operativa) de la Guardia Civil de Madrid, y criticó que el juez que llevó el caso [Juan Manuel Hermo] "no valoró bien ese trabajo y que su labor judicial no fue acorde al derecho". "En vez de hacer de instructor, enjuició las pruebas, cuando éstas están para valorarlas. Él no se puede convertir en un tribunal", agregó el abogado, que puntualizó que el juez dictó un auto de archivo "injusto, a sabiendas".
Fue el 25 de octubre de 2017 cuando el juez Juan Manuel Hermo dictó el archivo del caso Yeremi al considerar que no existía ningún indicio que permita incriminar a Antonio Ojeda, "ni a ninguna otra persona".
Marcos García encargó a un equipo de criminólogos y peritos que repasen este procedimiento para intentar reabrirlo y que su dictamen coincide en la línea apuntada por el instituto armado. "No se observa otra hipótesis", sostuvo, que la que apunta a alias El Rubio como presunto asesino del niño que jugaba en un descampado, junto a su casa, en El Canario el 10 de marzo de 2007.
El nuevo abogado de la familia de Yeremi recordó que el juez del caso tiene abierto un expediente en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por cómo trató a la Guardia Civil y puntualizó que está recabando declaraciones de testigos que tienen "quejas" sobre cómo les atendió el magistrado Juan Manuel Herno.
Para García Montes, el caso Yeremi guarda, en su opinión, muchas similitudes con el de José Bretón, condenado a 40 años de cárcel por matar a sus hijos Ruth y José, en el sentido de que existen indicios para transformar lo que parece sólo una desaparición en un asesinato.
A su juicio, Antonio Ojeda, que "sufre un trastorno", tenía "móvil, ocasión y beneficio" para matar a Yeremi Vargas, guiado, presuntamente, por los mismos deseos sexuales que años más tarde le llevaron a agredir sexualmente a otro niño en Doctoral, también en el término municipal de Santa Lucía de Tirajana, unos hechos por los que ahora cumple una condena de cinco años de cárcel.Otro cumpleaños triste
La jornada de ayer, día 18 de julio, era muy especial para la familia del desaparecido, al cumplir Yeremi el que sería su 20 aniversario. Su madre, Ithaisa Suarez Santana, manifestó ayer que afronta esta nueva etapa con "mucha esperanza" y confiada en poder "saber la verdad" algún día y también en poder "saber dónde está, recuperar lo que quede de él y tener un lugar donde ir a llorarle y llevarle flores". Lamentó que se sigan cumpliendo años sin saber dónde está, aunque sí sospecha qué le ocurrió.
Por otro lado, Pedro Sánchez, el letrado que representó durante años a la familia de Yeremi, se desmarcó ayer por completo de la estrategia planteada para reabrir el caso por el abogado Marcos García Montes, de la que discrepa y de la que no quiere formar parte.
"Siempre estaré al lado de la familia para lo que necesite de mí, pero no comparto esas formas de la nueva dirección jurídica. Las considero legítimas, pero no las comparto ni quiero formar parte de esa estrategia", aseguró Sánchez, que actualmente es concejal del Ayuntamiento.
