El barranco de Crespo, en el municipio de Valleseco, ya sufrió un incendio este mismo año. Ocurrió el 16 de mayo y las llamas, que fueron controladas en poco tiempo, afectaron a una hectárea y media. El ocurrido durante la tarde de ayer cogió más virulencia debido a que el ambiente estaba mucho más seco y la temperatura eran considerablemente más alta, y al cierre de esta edición había afectado a una superficie de unas 500 hectáreas. Ambos fuegos se originaron en un radio aproximado de un kilómetro.

El delegado del Gobierno en Canarias y vecino de Valleseco, Juan Salvador León, y el alcalde del municipio, Dámaso Arencibia, volvieron a repetir ayer la misma imagen de aquel día. Se dieron el apretón de manos y se asomaron a la ladera donde las llamas y el humo se habían hecho con el barranco. En cambio, la situación era completamente diferente. Si en aquella ocasión las llamas apenas suponía un problema para las poblaciones cercana, en esta ocasión avanzaban con mucha fuerza en dirección a Tejeda.

Los dos fuegos coincidían en que se originaban en una zona con una escarpada orografía, lo que dificultaba la acción de los equipos que trabajan desde tierra. Además, prácticamente se iniciaban a la misma hora. Mientras el ocurrido el pasado 16 de mayo empezó a las 16.45; el sucedido ayer lo hizo a las 15.50.

Medios aéreos

En el barranco de Crespo, el trabajo de los medios aéreos se convierte en esencial ante la dificultad de que se actúe desde tierra. No obstante, ya en mayo, cuando aún no existía una alerta por posibles incendios, actuaron tres aparatos desde el aire. Durante la jornada de este sábado se movilizaron siete helicópteros y un avión, que se espera que se incremente durante el día de hoy con dos helicópteros más y el hidroavión, que anoche aterrizó en Gando y se espera que a primera hora de la mañana de hoy comience a descargar el agua en la zona afectada por el tercer incendio en la Cumbre en una semana.