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Santa Lucía de Tirajana

El PSOE se abre a apoyos puntuales para dar estabilidad al gobierno en minoría

Agrupación de Vecinos y Partido Popular median para salvar la unidad del pacto mientras la concejala no adscrita Beatriz Mejías llama "dictador" al alcalde

Beatriz Mejías, izquierda, y Santiago Rodríguez, derecha, ayer durante la celebración del Pleno en Santa Lucía de Tirajana, con el interventor en el centro. juan castro

Mientras unos intentan calmar las aguas, otros continúan poniendo el dedo en la llaga. La recomposición del pacto en Santa Lucía de Tirajana comienza a caer en saco roto, y no solo por las duras manifestaciones de la concejala no adscrita Beatriz Mejías, que este miércoles llamó "manipulador y autoritario" al alcalde, Santiago Rodríguez, sino porque los intentos de AV-SLT y del PP para mediar y acercar posturas antes de que el regidor firme la destitución de Mejías y se fracture definitivamente el grupo de gobierno chocan de frente con las calificaciones de "dictador" que ésta vertió ayer durante la celebración del Pleno.

Mientras, el Partido Socialista lanza un salvavidas para garantizar la gobernabilidad en el municipio y la estabilidad de un gobierno con una minoría de 12 de los 25 concejales. En este sentido, su portavoz, Julio Ojeda, afirmó ayer que su formación "no está en la tesitura" de presentar una moción de censura, y por ello "existe la posibilidad de articular un grupo de gobierno en minoría con apoyos puntuales". Nueva Canarias, por contra, prefiere mirar hacia otro lado y no pronunciarse sobre la posible moción. "En este momento el asunto es otro, la gobernabilidad", señaló su portavoz, Francisco García, sin especificar cómo.

Previamente, en su intervención durante el turno de preguntas, Beatriz Mejías no solo no rebajó el tono de sus palabras, sino que lo aumentó y, visiblemente seria, volvió a insistir en que los concejales no pueden trabajar porque existe "autoritarismo". "Desde la presidencia ha sido un ordeno y mando y el resto teníamos que acatar", afirmó, al tiempo que señaló que se ha actuado de forma "dictatorial". No obstante, aseguró la concejala, la intención que ha tenido "no es otra que la de reconducir y hacer una llamada al diálogo".

"Esperaba que rectificase"

Una extraña llamada al diálogo que le afearon el resto de socios del grupo de gobierno, Agrupación de Vecinos y Partido Popular, así como el portavoz de La Fortaleza, Pedro Sánchez, y el propio alcalde, Santiago Rodríguez, al reclamarle que hubiese hecho tales declaraciones en los medios de comunicación y en el propio Pleno y no en una reunión privada donde pudieran resolverse las discrepancias sin recurrir a los escándalos públicos.

En declaraciones a los medios de comunicación al término de la sesión, el alcalde se mostró sorprendido por que Beatriz Mejías no hubiese mostrado arrepentimiento alguno por sus palabras, en las que también lo calificó de machista. "No esperaba en modo alguno que ratificase sus palabras en el Pleno; esperaba que si no iba a pedir disculpas, por lo menos no hablase", señaló Santiago Rodríguez. "No hay precedentes en la democracia de alguien que pertenece a un grupo de gobierno y tiene todas las competencias intactas haga acusaciones de este tipo y encima busque una nueva mayoría alternativa", agregó el regidor.

Santiago Rodríguez también se mostró molesto por la acusación de machismo. "No se puede permitir que alguien lleve al terreno de la desigualdad y de la diferencia de género una cuestión que solo responde a diferencia de criterios", aseveró el alcalde, "es peligroso que eso pueda ocurrir en esta sociedad; cuando damos el paso a la política se debe estar dispuesto a debatir y discutir, seas del género que seas".

Además, continuó el mandatario municipal, "me acusa de dictador cuando soy el único de los 88 alcaldes de Canarias que ha delegado todas las competencias y no se reservó ninguna; así que si tampoco acepta la coordinación por parte de este alcalde, entiendo que tenemos que apagar la luz y cerrar las puertas de este ayuntamiento". Su destitución, explicó Rodríguez, se debe a una cuestión de "dignidad política" porque no se puede tener dentro del equipo de gobierno a una persona que ha afirmado públicamente que busca otras mayorías alternativas.

De hecho, tras esa afirmación, dijo el alcalde, sospecha que esta situación sea la antesala de una censura. "Yo le pido que no haga esto y si quiere un argumento yo se lo doy; esa mayoría se configura hablando con todos los miembros del Pleno, y si quiere hacerlo no solo tiene mi beneplácito sino que Santiago Rodríguez prepara el espacio para que esa reunión se produzca y se pongan a trabajar", manifestó el alcalde santaluceño.

El regidor ha optado desde el miércoles por no entrar a valorar cada una de las acusaciones porque, dice, tiene un talante totalmente distinto a Beatriz Mejías. "Tengo otra educación y no voy a entrar en bajezas", sostuvo, "la vida política se está deteriorando porque el nivel cultural de los que están llegando a la vida pública deja mucho que desear; nuestras instituciones están retrocediendo por la llegada masiva de personas que no están cualificadas para ciertas tareas".

Durante la sesión plenaria, por otro lado, el portavoz del PP, Marcos Rufo, animó a ambas partes a reconducir la situación. "Esto es un tema puntual, no tiene por qué ser el fin de nada; las diferencias son salvables". Por su parte, el cabeza de lista de AV, Manuel Hernández, mostró su "solidaridad y comprensión" tanto con Mejías como con Rodríguez y les instó a sentarse a hablar para restablecer la relación entre los socios afectados.

En declaraciones a este periódico, el alcalde Santiago Rodríguez aseguró que está dispuesto a replantearse la destitución de Mejías si ésta pide perdón por acusarlo por cosas "muy graves" que, dijo, no ha hecho.

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