El Cabildo de Gran Canaria declaró ayer oficialmente extinguido el gran incendio de Valleseco 40 días después de su inicio. Mientras, los ayuntamientos comienzan a limpiar los barrancos para evitar que los restos de vegetación atasquen los cauces y provoquen inundaciones. De momento, la institución insular ha contabilizado más de 600 solicitantes particulares para acceder a las ayudas públicas, aunque el número puede aumentar porque todavía existen personas sin rellenar la documentación.

El pleno insular estudia hoy la aprobación de una partida de cinco millones de euros en programas de empleo para actuar en las zonas quemadas, aprovechando algunas partidas no ejecutadas. La iniciativa será coordinada por los ayuntamientos y empleará a 110 trabajadores que se encuentran en el paro durante tres meses para actuar en las zonas quemadas. A este plan se sumarán nuevos programas laborales en los próximos meses.

De momento, la institución insular anunció ayer la extinción del fuego de Valleseco, el más importante de los registrados. De esta forma, "todos los incendios de este verano en Gran Canaria han sido declarados extinguidos". El incendio se originó el sábado 17 de agosto.

En el periodo estival los equipos de emergencias actuaron contra cuatro fuegos forestales de grandes dimensiones, como fue el primero de Artenara, luego el citado de Valleseco, y cuando todavía se trabajaba en este, surgió otro en Cazadores, en Telde. Y más reciente fue el de las Lagunetas, en Valleseco.

Los trabajos ahora se centran en recuperar todas las zonas afectadas, así como en prevenir los perjuicios que podría causar.

Valleseco inició esta semana la limpieza del Barranco de La Virgen, con el propósito de prevenir las posibles consecuencias que podría ocasionar el terreno quemado. "Este cauce se encuentra situado en la zona cero del mismo, que pudiera crear peligro el flujo de agua en caso de futuras precipitaciones, que vendría acompañadas de residuos del propio incendio", según el ayuntamiento, que habla de que "se está realizando la limpieza del cauce en cuatro puntos del barranco, en un tramo de 20 y 50 metros lineales frente a cada uno de los puentes que presentan más peligro de desbordamiento, y que pudieran ser cuellos de botella".

Valleseco apunta que "el barranco no se ha limpiado a lo largo de la historia, lo que ha contribuido a la proliferación excesiva de plantas en el cauce, de árboles y arbustos en las orillas, lo que genera una alta preocupación por lo que pudiera pasar, visto cómo el cambio climático está afectando a diferentes zonas del planeta y las posibles consecuencias de una altas precipitaciones, donde el cauce bajaría con muchos residuos del brutal incendio que hemos padecido".

El grupo de gobierno admite que la población de Valsendero y Barranco de la Virgen les han transmitido "su temor a que se desborde el barranco por la falta de limpieza, y anegue sus viviendas y fincas, después de ver imágenes de la gota fría que ha afectado a poblaciones españolas recientemente. Defienden que el mantenimiento de los cauces es urgente debido a la gran cantidad de agua que desde las zonas altas recalan en el barrio".

Dinero en manos municipales

El consejero de Presidencia del Cabildo y alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa, apunta que hasta el momento se han superado las 600 solicitudes de ayudas por parte de afectados. Y que esta cifra se puede todavía incrementar, ya que existen particulares que siguen tramitando la documentación para acceder a las aportaciones públicas con las que recuperar su vida personal y los negocios.

Los técnicos siguen revisando la documentación presentada por los damnificados para verificar su fidelidad, contando con la colaboración de los colegios profesionales de los agrónomos y de arquitectos. De ahí que todavía se desconozca cuando pueda hacerse efectivo el cheque para que las familias puedan recuperarse de las penurias. Lo que sí está determinado es que los ayuntamientos servirán de mediadores del dinero del Cabildo, para agilizar los procedimientos.