Agüimes celebró ayer la cuadrigésimo cuarta edición de la Traída del Gofio y del Agua, un evento que consolida la tradición molinera en el municipio y que stuvo lugar una semana después de la subida del millo. A las 19.00 horas de la tarde partió desde el molino de Lolita y Ananías, ubicado en la carretera que une el casco de Agüimes con el barranco de Guayadeque.

Varios cientos de personas participaron de esta tradición, ataviados con la vestimenta tradicional canaria. Desde media tarde la villa se llenó de agüimenses que no quisieron perder la oportunidad de disfrutar de una de las fiestas más curiosas de la Isla, en la cual los participantes se lanzan kilos y kilos de gofio y agua, una acción que perfumó la localidad con un intenso aroma a pella. La Traída del Gofio y del Agua se enmarca en las actividades programadas dentro de las fiestas en honor a Nuestra Señora del Rosario.