Un modificado de la obra de la GC-21 de Tamaraceite a Teror obliga a retrasar los plazos. Los trabajos, que estaban previstos que terminaran el pasado mes de septiembre, concluirán como pronto en diciembre. La construcción de nuevos muros de contención debido a la aparición de dificultades en la obra ha forzado la elaboración de este modificado que ya ha sido acordado entre la constructora y el Cabildo de Gran Canaria.

En las próximas semanas, antes de final de octubre, la constructora tiene previsto iniciar la segunda gran parte de la obra entre el Barranco de Zapatero y Miraflor, para luego afrontar el modificado del proyecto de una obra que tiene como prioridad el ensanchamiento de la calzada hasta los seis metros mediante la ejecución de desmontes o muros de contención y la pavimentación de los arcenes en todo el recorrido, además de la mejora del trazado en los tramos más dificultosos.

Aunque Nueva Canarias en Teror, principal partido de la oposición en dicho municipio y del grupo de gobierno en el Cabildo, alertó ayer de un "parón de la carretera por falta de recursos económicos para terminar la vía", tanto el Cabildo como el Ayuntamiento desmintieron dicha información. "La obra sigue adelante con las complicaciones y leves retrasos propios de una obra de estas características", subrayaron fuentes de ambas instituciones. El comunicado del grupo nacionalista denunció que la carretera "tendrá que permanecer cerrada sine die porque ésta no cumple con parámetros de seguridad para la circulación", ante lo que las mismas fuentes recordaron que la obra sigue su ritmo sin mayores problemas que dicho modificado.

La carretera estuvo abierta de manera permanente durante las dos semanas principales de la festividad del Pino, del 30 de agosto al 15 de septiembre, y desde entonces se mantiene cerrada de lunes a viernes. Los fines de semana permanece abierta desde las 18 horas del viernes a las 8.00 de los lunes. Asimismo, permaneció totalmente cerrada al tráfico y a los peatones del 22 de julio al 23 de agosto.

Reparación de la GC-219

Por otro lado, el Ayuntamiento de Teror instó al Cabildo de Gran Canaria "a que se tomen las medidas necesarias para la urgente reapertura de la GC-219, en el tramo comprendido entre el Puente del Molino y la Vuelta de Los Alambres, que permanece cerrado al tráfico desde noviembre de 2018, tras el desprendimiento de grandes rocas".

El tramo, de titularidad insular, se cerró al tráfico tras el desprendimiento de grandes rocas el 24 de noviembre de 2018, para preservar la seguridad de vehículos y viandantes. Pocos días después, se emitió un informe técnico de emergencia por parte del Cabildo de Gran Canaria, para la posible ejecución inmediata de las obras precisas, asegurando el talud y poder abrir lo antes posible. "Sin embargo, pese a las diversas y variadas fundamentaciones no fue interpretado de forma favorable por parte de los servicios Económicos del Cabildo, al considerar que no quedaban incomunicados los núcleos habitados y que el recorrido alternativo para los usuarios de dicho tramo no superaría los 3 kilómetros", añade el Ayuntamiento en su comunicado.

El grupo de gobierno municipal, formado por PSOE y PP, llevará este jueves a la sesión plenaria una moción para debatir este asunto, "después de las gestiones realizadas con la institución insular, con el objeto de activar las actuaciones necesarias para la urgente apertura de la GC-219", añaden.