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Cabildo

Veterinarios y protectoras culpan a los alcaldes del abandono animal

Los profesionales ven "inaceptables" las 874 muertes en el Albergue - Los ayuntamientos incumplen con las campañas de esterilización

El veterinario Enrique Rodríguez y una trabajadora del Albergue de Bañaderos cuidan a uno de los perros abandonados, en enero de 2019. J. PÉREZ CURBELO

Los veterinarios y las protectoras de animales de Gran Canaria consideran que las cifras de sacrificios y fallecimientos de perros y gatos en el Albergue Insular de Bañaderos son "totalmente inaceptables" y culpan de ello a la "nula implicación" de la mayoría de los alcaldes de la Isla a la hora de aplicar las medidas acordadas en el Pacto por el Bienestar Animal, firmado hace un año por el Cabildo, los 21 ayuntamientos y colectivos sociales para frenar el abandono de mascotas.

Tras conocer el balance del Albergue en el año 2019, que pese a la bajada de un 20% en el número de entradas registró 874 muertes de perros y gatos - 535 por eutanasia y 339 por fallecimientos naturales-, los veterinarios y las protectoras aseguran que "lo que sigue fallando en Gran Canaria" es la escasa o nula participación de los ayuntamientos en la persecución del maltrato animal.

A modo de ejemplo, ningún Ayuntamiento se dirigió en todo el año 2019 al Colegio de Veterinarios para desarrollar las campañas anuales de identificación y esterilización a las que se comprometieron al firmar el Pacto del Bienestar Animal. Tampoco se ha construido ningún refugio municipal para reducir la masificación en Bañaderos ni se han elaborado las ordenanzas municipales contra el maltrato, las dos principales medidas del acuerdo auspiciado por Miguel Ángel Rodríguez, el anterior consejero de Medio Ambiente del Cabildo.

Enrique Rodríguez, uno de los firmantes del Pacto como presidente del Colegio de Veterinarios, sostuvo ayer que "no es normal" que en las instalaciones del Albergue murieran 339 animales en un año, aparte de los 535 sacrificados, y lo achacó al hacinamiento. "El sacrificio es porque la entrada de animales abandonados desborda la capacidad del Albergue, por eso es lógico que se restrinja la entrega por parte de los ayuntamientos", explicó Rodríguez, quien apuntó que "abandonar un perro en el municipio de Las Palmas de Gran Canaria era tan fácil como llamar por teléfono y te lo iban a recoger a casa".

Aunque la reducción de las entradas en un 20% es "muy buena noticia", el veterinario dijo que también sería importante conocer el número de animales abandonados que acaban en las protectoras de animales, probablemente una cifra similar a los 2.662 que ingresaron en Bañaderos el año pasado.

Según datos oficiales de 2018, la principal causa del abandono en España y en Canarias fue por las camadas indeseadas, síntoma de que hay "un enorme porcentaje de hembras no esterilizadas y machos no castrados, lo que da lugar al gran número de cachorros abandonados".

Aunque hay municipios que han logrado el sacrificio cero, como Ingenio y Mogán, Rodríguez aseguró que los ayuntamientos "no están cumpliendo su parte del Pacto de Bienestar" y puso como ejemplo que a la convocatoria del presidente Antonio Morales en el mes de diciembre fueron muy pocos alcaldes y se les reprochó que no llevaran ninguna iniciativa política para cumplir lo firmado en enero.

"El Cabildo y los colectivos están haciendo un gran esfuerzo, pero mientras no se vaya a la fuente del problema, que son las campañas de esterilizaciones a las que se comprometieron los ayuntamientos, la situación persistirá", subrayó el veterinario.

En el primer año del Pacto solo se ha realizado una campaña de esterilización, financiada por el Cabildo con 150.000 euros y realizada por voluntarios de la Federación de Asociaciones Unidas por la Defensa Animal de Las Palmas (Fauda). La campaña de identificación con chips a la que se comprometió el anterior Gobierno de Canarias, con 300.000 euros, "también quedó en agua de borrajas", recalcó.

María Cazorla, presidenta de Fauda, coincidió en que la cifra de casi 900 fallecimientos en el Albergue "es totalmente inaceptable" y advirtió que es posible que también haya sacrificios en otras instalaciones. "El Cabildo ayuda y quizá desciendan los abandonos, pero el problema persiste y la provincia de Las Palmas está a la cabeza de Europa en maltrato animal", recordó.

"El problema tiene dos raíces: la nula gestión por parte de los ayuntamientos, desde la Policía Local hasta la propia administración política; y la educación de las personas", señaló Cazorla, quien insistió en que "mientras haya alcaldes que no cumplan con su parte del Pacto, seguirán los sacrificios y abandonos". A su juicio, "las protectoras, como mano de obra barata, son las que están sacando las castañas del fuego a las administraciones".

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