El Bien de Interés Cultural (BIC) del Oasis de Maspalomas, en el sur de la isla de Gran Canaria, "carece" de rigor histórico, puesto que no está probada documentalmente la presencia de Cristóbal Colón, lo que hace que no sea un hecho "histórico", sino "historiográfico", en el sentido de que se trata de una "construcción de los historiadores".

Así lo pusieron de manifiesto ayer Antonio Manuel Macías, Guillermo Morales Matos -ambos catedráticos- y Luciano Parejo -referente internacional del Derecho Administrativo-, coordinadores del I Seminario Nacional Canarias Nuevos Horizontes que ha estado dedicado a la 'Responsabilidad Patrimonial de la Administración en la legislación cultural y su gestión', durante la clausura del encuentro.

De esta manera, han entendido que el único motivo que determinó la formación del expediente de este BIC no es "un elemento arquitectónico o vestigio arqueológico concreto, singular y notorio", sino "la pretendida presencia de Colón a bordo de las naves en la zona".

Precisamente Macías hizo especial hincapié en que la declaración de cualquier BIC tiene que ser un acontecimiento o recuerdo del pasado "bien probado". "Tienen que haber hechos históricos perfectamente documentados para que el BIC objeto de discusión siga su trámite", observó.

Además, comentó que dicho Bien debe tener un valor que no sea estrictamente "local", sino más bien "excepcional" porque si el hecho histórico no tiene un alcance nacional o internacional su potencial para contar con esta declaración es menor.

"Hemos examinado el BIC del Oasis de Maspalomas -insistió-, que ya ha sido tramitado y sobre el que el Tribunal Supremo ya ha dicho que es un Bien de Interés Cultural. Esa es una realidad, con la que podemos estar o no de acuerdo, pero ya es una realidad".

No obstante, Macías entendió que este caso no se trata de un hecho histórico y que la presencia de Colón en el Oasis y en la Charca de Maspalomas el 24 de mayo de 1502 no está probada documentalmente, lo que lo convierte en un hecho "historiográfico".

"Cientos de historiadores"

"¿Y qué entendemos por hecho historiográfico? Una construcción de unos historiadores, una fantasía... por lo tanto, es un hecho discutible y refutable. Habrá cientos de historiadores que siempre discutirán el alcance de un BIC que contraviene la norma porque no está documentado fehacientemente como hecho histórico", matizó.

Ante esta situación, expuso que este tipo de declaraciones BIC están haciendo un "flaco favor" a la sociedad y a la historia de Canarias ya que, dijo, lo que importa no es la historia de un personaje, sino la historia de una colectividad. "Dudosa fórmula" para pasar de un hecho históriográfico a un hecho histórico.

Además, los coordinadores han destacado la "dudosa fórmula que permitió que aquel discutible hecho historiográfico" alcanzara "el rango de incuestionable hecho histórico": el informe favorable a dicha declaración, aprobado por el Consejo de Patrimonio Histórico de Canarias en sesión celebrada el 24 de julio de 2014.

Para estos expertos, dicho informe "no fue el resultado de un riguroso debate científico, de un contraste de tesis e hipótesis de trabajo que permitiera afirmar, más allá de toda duda razonable, la presencia colombina en el Oasis y la Charca de Maspalomas el 24 de mayo de 1502".

Muy por el contrario, el informe emitido por dicho Consejo afirmando la veracidad de este evento "fue el resultado de una votación que contó con 8 votos favorables, 7 en contra y dos abstenciones".

Como las abstenciones deberían haber sumado en un debate de tal trascendencia, "este resultado invalida totalmente dicho informe, y más aun cuando únicamente tres de los expertos que votaron favorablemente dicha declaración tienen formación histórica".

La declaración como BIC "tuvo como único fundamento empírico lo que dice un corto fragmento del diario redactado por Hernando Colón, que a la edad de 13 años acompañó a su padre en su último viaje a América".

Dicho fragmento solo menciona la llegada a Gran Canaria el 20 de mayo de 1502, para después decir: 'El 24 pasamos a Maspalomas, que está en la misma isla, para tomar el agua y la leña necesarias en el viaje. De aquí partimos la noche siguiente hacia las Indias'.