Los servicios jurídicos del Cabildo de Gran Canaria estudian acudir a los tribunales ante la afirmación efectuada por un historiador y un geógrafo de Tenerife de que el expediente para la declaración de Risco Caído y los espacios sagrados de la isla como Patrimonio de la Humanidad fue "manipulado".

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, en declaraciones a los periodistas, ha señalado que la comunidad científica coincide en que el expediente ha cumplido con los requisitos que se precisan para el reconocimiento de esos espacios como Patrimonio de la Humanidad.

Los dos especialistas de Tenerife aseguraron el lunes que había habido una campaña institucional de manipulación, falseamiento y engaño con el objetivo de hacer creer que la cueva C6 de Risco Caído fue un observatorio astronómico, y negaron que en el lugar haya marcadores de este tipo.

Los investigadores son José Barrios, profesor de Matemáticas en la Universidad de La Laguna y doctor en Historia, y del geógrafo Eustaquio Villalba, quienes defienden que en la declaración de Risco Caído como Patrimonio de la Humanidad en julio de 2019 fue posible porque el propio Cabildo negó ante la Unesco que tuviera prueba alguna de la existencia de marcadores astronómicos en la citada cueva de Artenara.

Antonio Morales ha dicho también que la evaluación previa para su declaración contó con la aprobación de científicos de Canarias e internacionales, así como de las universidades públicas de las islas.

El presidente ha manifestado que "no tiene ningún valor" lo declarado por esos "dos señores", de los que desconoce si su intención es buscar protagonismo, y ha defendido que, dado el apoyo que tiene ese expediente, lo que sostienen no tiene "ninguna credibilidad e importancia".

La comunidad científica de Gran Canaria acudió rápidamente a responder a las dudas. Así, José de León, arqueoastrónomo y director de Patrimonio del Cabildo, contestó que "vivimos en un país, desafortunadamente, en el que los logros de algunos son muy mal vistos por otros". "No entendemos la acritud, es cierto que hay cosas de lo que ellos dicen que debemos seguir estudiando, pero de ahí a decir que es una maniobra del Cabildo para engañar a nivel mundial, son palabras mayores", agregó.

Juan Antonio Belmonte, experto en arqueoastronomía, censuró la actitud de sus colegas de La Laguna y se preguntó si creen que a la Unesco "se la puede manipular" tan fácilmente. "No me merece ningún respeto su opinión", aseveró. José Julio Cabrera, geógrafo y autor del libro La Luz en Risco Caído, propuso al Cabildo abrir las puertas de la cueva a todos los científicos que tengan dudas "para que lo vean con sus propios ojos". Por último, Julio Cuenca, descubridor de Risco Caído, respondió que Barrios "es un personaje muy peculiar" y que "ha optado por iniciar una campaña sucia contra este monumento astronómico".