René T. S., el delincuente que el pasado miércoles protagonizó una huida de 60 kilómetros entre Playa del Inglés y La Aldea que acabó en un accidente con cinco policías nacionales heridos leves, cuenta con al menos seis antecedentes policiales por tráfico de drogas y agresiones. Su compañera de huida, de 39 años y que manifestó que nada tenía que ver con la decisión del conductor de evadir un control policial, cuenta con otros tres hechos delictivos anteriores.

Los dos detenidos se encuentran en los calabozos de la comisaría de Maspalomas a la espera de su pase a disposición judicial, que está prevista, inicialmente, para la mañana de hoy. Y es que el seguimiento que realizaron al menos tres vehículos de la Policía Nacional se inició en Playa del Inglés, concretamente en la avenida Alejandro del Castillo. Allí, según fuentes cercanas a la investigación, una patrulla ordenó el alto a los dos ocupantes de un Fiat Panda. Eran las seis y media de la mañana, aún de noche, cuando se inició una fuga a alta velocidad por la autopista del Sur.

Los vehículos policiales siguieron a una distancia prudente al turismo en el que iban René T. S. y su acompañante, con el objetivo de evitar situaciones que pusieran en riesgo a terceras personas. Así, el delincuente no cesó en su empeño de intentar evitar a los agentes, continuando el trayecto que siguió por la GC-200 pasando por Mogán y Veneguera hasta llegar a La Aldea. Mientras tanto, la Policía Nacional ya había pedido la colaboración de la Guardia Civil y las policías locales, con el objetivo de intentar parar la trayectoria del fugitivo que ya había recorrido casi media isla. Por el camino, el conductor colisionó con una valla y también estuvo a punto de chocar contra coches particulares que se dirigían hacia el sur de la Isla.

El seguimiento continuó en la carretera nueva de La Aldea. Todo indicaba que se iba a introducir en el túnel. Sin embargo, René T. S. cometió un error después de 60 kilómetros de fuga: se metió por el desvío que da al mirador del Andén Verde, una vía sin salida al estar cortada la antigua carretera del noroeste.

Fue ahí donde la fuga llegó a su fin. Cuando trataba de reincorporarse a la GC-2, el Fiat Panda colisionó con un vehículo camuflado de la Policía Nacional y contra otro patrulla. El resultado: cinco agentes con heridas de carácter leve y los dos fugados detenidos y con lesiones de carácter leve. Ambos fueron trasladados a un hospital y después a dependencias policiales.