El Cabildo de Gran Canaria tuvo que suspender la Feria Insular de la Juventud del año 2019 por los retrasos acumulados en su contratación, de forma que la única empresa que se presentó al concurso público se vio obligada a renunciar al contrato porque solo disponía de unos días para organizar el encuentro, en el que iban a participar entre 1.000 y 1.500 jóvenes provenientes de todos los municipios de la Isla.

Mientras que para la consejera de Educación y Juventud, Olaia Morán, la anulación de la feria se debió "únicamente" al desestimiento de la empresa adjudicataria por las demoras en la contratación, para el portavoz del principal grupo de la oposición, Marco Aurelio Pérez (PP), "demuestra una vez más la desidia de este gobierno insular a la hora de trabajar".

Morán precisó que la empresa que ganó el concurso, Galicia Outsourcing S.L.U., renunció al contrato una semana antes porque consideró que no tenía tiempo suficiente para preparar la infraestructura. "La empresa es de la Península y en un primer aceptó porque pensó que era capaz de gestionar la Feria, pero después comunicó que no podía hacerlo en ese tiempo.

Por tanto, el gobierno insular optó por la anulación, ya que el Cabildo no tiene medios propios para organizar ese tipo de encuentros. La feria se pospone al mes de noviembre de este año y también se mantiene el lugar de la celebración, las instalaciones de Infecar.

"Ya estamos sospechando que también que hay un gafe en el Cabildo", replicó Marco Aurelio Pérez. Tras considerar que el presidente Morales "ha perdido los primeros meses de mandato en conformar el gobierno tripartito, sin hacer nada más", el portavoz de los populares añadió que "este Cabildo tarda tanto tiempo en sacar los expedientes que la empresa ha tenido que desistir porque no tenía tiempo material para organizar esa feria".

Perjudicados

Tras recordar que los errores en el procedimiento de contratación han obligado al Cabildo a posponer por tercera la adjudicación de los concursos públicos para la gestión de los centros de menores, por una cuantía de 46,9 millones de euros, Pérez sostuvo que, "una vez más, los grandes perjudicados son los jóvenes de Gran Canaria" una vez más.

Con el precedente de la primera feria, que se celebró del 18 al 20 de octubre de 2018 en la trasera del Teatro Pérez Galdós, el gobierno insular inició la tramitación del encuentro juvenil el 28 de mayo de 2019, dos días después de las elecciones del Cabildo que revalidaron la victoria de Nueva Canarias (NC) y la presidencia de Antonio Morales.

Ese día, la Consejería de Recursos Humanos, Educación y Juventud, dirigida por la socialista María Isabel Santana, emitió el informe que justificaba la necesidad de la contratación del Servicio de Organización, Planificación y Desarrollo de la II Feria de la Juventud 2019.

En ese documento se anunciaba la fecha prevista para la celebración, los días 21 y 22 de noviembre, con el objetivo principal de "favorecer el acercamiento de los jóvenes en aspectos básicos y cotidianos de ocio saludable, formación e información".

"Se dirige -añadía dicho informe- a personas de 14 a 30 años y ofrecerá actividades básicas en materia de salud, habilidades sociales y competencias laborales sobre materias de relevancia; y contará asimismo con stand informativos de ayuntamientos con sus ofertas para jóvenes, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y asociaciones varias". El valor estimado de la contratación se fijó en 66.030 euros, a través de una adjudicación por el procedimiento abierto simplificado.

Ese expediente de contratación no se movió hasta el 5 de agosto, día en que se emitió un informe con los criterios para adjudicar la organización de la feria que se debían incluir en el pliego de cláusulas administrativas particulares. Con una valoración máxima de 100 puntos, la oferta económica se podría evaluar hasta los 49 puntos y los criterios basados en la calidad del servicios en un máximo de 51 puntos.

Más de un mes después, el 26 de septiembre, la Consejería de Educación y Juventud emitió una resolución para iniciar el procedimiento abierto, en el que se aprobó el pliego de condiciones, el expediente de contratación y el gasto de 66.030 euros. Esa resolución se trasladó al Servicio de Contratación, la Intervención y al Órgano de Apoyo del Consejo de Gobierno.

El plazo para la presentación de ofertas venció el 14 de octubre y el expediente se llevó a las reuniones de la Mesa de Contratación del 30 de octubre y del 8 de noviembre. En esta última fecha, a trece días hábiles para el comienzo de la feria, se conoció que solo había un aspirante a organizar la feria, la empresa Galicia Outsourcing S.L.U., por lo que se propuso la adjudicación.

El 12 de noviembre, a solo nueve días del comienzo del encuentro juvenil, el representante de la empresa comunicó la renuncia al contrato y alegó "el poco espacio para la preparación de la misma". El 5 de diciembre, a la vista del desestimiento, la consejera Olaia Morán dio por cancelada la feria por quedar desierto el concurso público y la pospuso para este año 2020.

La I Feria Insular de Juventud, bajo el lema Rumbo, se celebró en la Plaza Stagno, junto al teatro Pérez Galdós, y congregó a más de 1.000 participantes de los 21 municipios de la Isla. Hasta entonces, el sector joven no contaba con un espacio que englobara ocio saludable, formación e información, según destacó la entonces consejera de Educación y Juventud, María Isabel Santana.

La primera Feria contó con puestos informativos de los municipios, de la ULPGC y de asociaciones como Cear Canarias, Barrios Orquestados, Gamá, Jóvenes Agricultores o Cruz Roja. En ella se trataron cuestiones útiles como los pagos de impuestos, presentar una instancia, o qué hacer cuando llega una multa.