En tiempos de cuarentena, tanto los que viven en España como en otras partes del mundo, tras la llegada del coronavirus, lo mejor es confinarse como establece el estado de alarma decretado por el Gobierno de Pedro Sánchez. Cerrar los colegios para evitar el contagio entre los menores y que estos fueran vectores de propagación de la enfermedad fue una de las primeras medidas dictadas en el país, pero no todos los niños y niñas viven en la misma casa con sus progenitores. Están los que son hijos de padres divorciados con custodia compartida y que, según un estudio de la Asociación Española de Abogados de Familia (Aeafa), un 77% de los jueces prefieren mantener en esa situación.
Desde Aeafa piden principalmente a los progenitores que tengan "sentido común" y que lleguen a un acuerdo en beneficio de sus hijos para "evitar la judicialización" en este momento, ya que es una "situación excepcional". En especial porque el estudio llevado a cabo por esta asociación refleja que, de las juntas de jueces de 43 territorios, 33 ya se "han pronunciado a favor de mantener la custodia compartida de los hijos de padres y madres separados, mientras que diez han decidido suspenderlas".
La pandemia que se vive en el país y, en consecuencia, la entrada en vigor del estado de alarma el pasado 14 de marzo, afecta a las parejas separadas y/o divorciadas que tengan hijos menores y cuyo sistema de reparto de tiempo sea la custodia compartida, el régimen de visitas y estancias. Es por ello que debe primar "la sensatez, el interés y protección de los niños y niñas para preservar la salud de los hijos, de los padres, madres y del resto de la familia extensa, en particular de nuestros mayores", recomienda la presidenta de Aeafa, María Dolores Lozano, en un comunicado.
"El problema no son los niños, niñas y/o adolescentes, sino las voluntades encontradas entre padres y madres ante esta situación, y al hecho de que, en más ocasiones de las deseables, se producirán incumplimientos en relación a las medidas vigentes", explica Lozano. "Por tanto, es una labor de conciencia y honestidad de los padres y de las madres, cumplir con las resoluciones judiciales, salvo que existan, en cada caso concreto, motivos de suficiente entidad para no hacerlo, es decir, una labor de distinguir entre los casos de incumplimiento justificados y los casos de incumplimientos intencionados", reseña la abogada de familia.
El desplazamiento para entregar a los menores está autorizado y para ello se deben tomar medidas sanitarias como las recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, Dolores Lozano recuerda que pueden presentarse "casos de niños, niñas o adolescentes con patologías previas que suponen una vulnerabilidad mayor a las enfermedades y al Covid-19 en particular", manifiesta. "La lógica, la sensatez y la prudencia indican que es un riesgo para ellos salir del domicilio habitual", insiste la letrada.
Desde la asociación también apuntan que lo adecuado a la hora de realizar el desplazamiento para entregar al menor se lleve consigo la documentación de la sentencia de divorcio para justificar el traslado ante las Fuerzas de Seguridad del Estado.
El estudio de Aeafa también reseña que 41 juntas de jueces se han pronunciado respecto al mantenimiento de los traslados para fines de semana alternos, de los cuales 28 están a favor de continuar con los traslados de los hijos para dichas visitas y 13 en contra. Es decir, el 68,30% a favor. En cuanto a las visitas intersemanales sin pernocta, 37 juntas de jueces se han manifestado, de las que tres están a favor de mantenerlas (8%) y 34 en contra (82%). Y en el caso de las visitas intersemanales con pernocta, de 36 juntas de jueces 15 están a favor de su continuidad y 21 en contra (62%).
En el caso de las visitas a los abuelos, todos los jueces se manifestaron en contra de mantenerlas. La asociación también reseña que en la mayoría de los acuerdos de las juntas de jueces se "insta a los padres y madres a establecer las medidas necesarias para hacer compatible el derecho del menor a relacionarse con ambos y la responsabilidad que todos los ciudadanos tenemos de evitar en la medida de lo posible la cadena de propagación del virus".
Desde la asociación también reseñan que "hay muchos acuerdos de padres y madres que compensarán días de visita cuando el aislamiento acabe", para evitar trasladar a los menores de una vivienda a otra. A su vez, proponen el uso de herramientas de videollamada para aquellos casos en los que el menor no pueda ver a uno de sus progenitores de manera presencial. "Es posible poder acompañar a los niños mientras hacen sus tareas escolares, o jugar con ellos a través de dichos sistemas telemáticos", para ello, los padres y madres deberán "normalizar la situación, procurando establecer mecanismos alternativos, y evitar crear a los niños situaciones estresantes e innecesarias". Siempre recordando que el "diálogo" y el "consenso" deben primar para poder afrontar esta situación excepcional de la mejor manera y sin perjudicar de ninguna forma al menor.
