Algunas de las personas que anoche se manifestaron en Tunte contra la llegada de un grupo de inmigrantes que iba a pasar la cuarentena obligatoria en la antigua residencia escolar del pueblo increparon a un equipo de Televisión Canaria y le forzaron a interrumpir un directo.

Según se aprecia en las imágenes grabadas por la propia cadena pública, la periodista Esther Pulido se disponía a informar sobre la situación en el pueblo, ya cayendo la tarde, cuando una vecina se dirigió a ella, increpándola, y otra empezó a tapar con sus manos el objetivo de la cámara que registraba su intervención.

El cámara Aday Pérez acudió en ayuda de sus compañera y ambos tuvieron que retirarse al vehículo de la cadena ante la situación que había generado esa parte de los manifestantes a su alrededor, con expresiones y gestos cada vez más airados.

La protesta en Tunte comenzó a fraguarse a primera hora de la tarde, cuando llegó al pueblo la noticia de que los 80 inmigrantes que residían allí desde hace meses, procedentes de anteriores pateras, iban a ser trasladados a otros lugares para dejar sitio a un grupo de jóvenes africanos que iniciaba su cuarentena.

Parte de los manifestantes ligó su oposición a la sospecha de que esas personas podían ser portadoras del coronavirus -"No queremos vivir con miedo", se leía incluso en alguna pancarta-, a pesar de que la Delegación del Gobierno había dejado claro que ninguna había dado positivo en las pruebas PCR que habían pasado en el muelle de Arguineguín, donde habían dormido tres noches bajo carpas.

Desde hace meses, Canarias hace test PCR a todos los inmigrantes que llegan a sus costas y les somete a un período de cuarentena, reforzada en condiciones de aislamiento si han dado positivo.

Hasta la fecha, no se ha producido en Canarias ningún contagio de covid-19 originado por una persona llegada en patera, ni entre los marinos de Salvamento Marítimo que los socorren en el mar, ni entre los miembros de las fuerzas de seguridad y servicios sanitarios y de emergencia que los atienden una vez llegan a tierra, han remarcado tanto la Consejería de Sanidad como la Delegación del Gobierno.

Todos los brotes detectados entre los ocupantes de las pateras han quedado, hasta el momento, reducidos a sus compañeros de travesía y se han solventado sin que fuera necesario hospitalizar a nadie.