El Patronato de Turismo de Gran Canaria ha iniciado este jueves una ronda de contacto con representantes diplomáticos de diversos países en Canarias con el cónsul de Italia en la provincia de Las Palmas, Carlos De Blasio, con la que pretende trasladar la imagen de la Isla como un destino seguro frente al coronavirus.

El presidente del Patronato y consejero de Turismo de Gran Canaria, Carlos Álamo, se reunió con el cónsul honorario de Italia en la provincia de Las Palmas, Carlos De Blasio, y un grupo de representantes de esta comunidad nacional en la Isla, con la intención de sumar esfuerzos en la recuperación del sector, según reza un comunicado difundido este jueves por la institución turística.

Los representantes italianos "se mostraron implicados ante lo que consideran un objetivo común y se comprometieron con el consejero en apoyar el mensaje de Gran Canaria como destino seguro frente a la pandemia".

Con esta reunión, desde Turismo de Gran Canaria se abre una ronda de contactos con los distintos representantes consulares y las principales asociaciones de residentes extranjeros en la Isla con vistas a celebrar una reunión con el grueso de altos funcionarios extranjeros que se va a producir en el mes de septiembre, ha especificado el Patronato de Turismo.

La ronda se ha iniciado con el cónsul italiano, al ser esta la comunidad con más residentes en Canarias. En la misma, participaron: Maurizio Mior, representante de la asociación italiana Fogolar Furlan; Giusseppe Bucceri, presidentes de la Asociación de Pensionistas Italianos en España; y el propio cónsul honorífico de Italia en la provincia de Las Palmas.

El Patronato pretende apoyarse en las distintas vías de comunicación e interlocución estatal y de las numerosas que disponen estas asociaciones en el país de origen para transmitir la realidad sanitaria de Gran Canaria y el mensaje de fuerza de que la isla, con uno de los índices más bajos de Europa en cuanto al número de casos con coronavirus, es un destino del todo seguro para la llegada de turistas.

La representación italiana pudo transmitir, a su vez, algunos de los problemas de la comunidad que representan y que, en buena parte, se resumen en un interés común en el objetivo de recuperar el sector, ya que muchos son empresarios con importantes inversiones y que trabajan directamente con la clientela turística. Por este motivo, señalaron la necesidad de trabajar en un frente común para poder transmitir la realidad del destino turístico ante un cliente que contó con algo más de 455,000 visitantes a Canarias en 2019.

"La comunidad italiana, que es la más numerosa del Archipiélago canario, ha realizado muchas inversiones en el sector turístico, está muy interesada en la recuperación turística y está haciendo todo lo posible para promover la llegada de turistas e inversiones en las Islas Canarias", señaló Maurizio Mior, que representa a una asociación sin ánimo de lucro y con origen en la región montañosa de Fruili, especialmente vinculada con la emigración.