El análisis y diagnóstico de los resultados obtenidos con los proyectos de renovación de zonas comerciales abiertas ejecutados hasta 2010 en varios puntos de Gran Canaria revelan que el 33% de los empresarios que se vieron afectados por las obras lograron incrementar sus ventas al menos un 5%.

Otro porcentaje significativo apuntó a los encuestadores que había logrado mantener la suya y, en general, todos coincidieron en señalar que los trabajos habían provocado un aumento de la afluencia de transeúntes de entre un 5 y un 10 por ciento.

En las 41 intervenciones tuteladas hasta ese año se constató que el 10% de la totalidad del comercio minorista de Canarias se había "beneficiado" directamente de los proyectos pergeñados. Las estadísticas dan cobijo a un total de 2.071 comercios y a otros 383 establecimientos hosteleros, con bares, restaurantes y cafeterías a la cabeza.

Continuar con la recuperación y modernización y promoción de los centros tradicionales de compras, fomentar el asociacionismo, vincular el comercio minorista al turismo, incidir en la formación e impulsar la innovación tecnológica del sector, estimular las ventas con un cambio de cultura empresarial y "atraer al consumidor final que se ha instalado en los centros comerciales cerrados", son, según el Cabildo, los objetivos de este programa.