El pelete y los apenas dos grados de temperatura máxima que a las 12.00 del mediodía de ayer se registraban en el Pico de las Nieves solo podían combatirse con un buen vaso de chocolate caliente. Y con un buen abrigo, unos guantes, un gorro y un chubasquero o un paraguas para protegerse de la lluvia. Centenares de personas se desplazaron hasta la cumbre de Gran Canaria para disfrutar de un día gélido y con temperaturas que casi cortaban la respiración, pero que no impidieron que muchos aprovecharan el sábado para contemplar una estampa muy poco habitual en la isla: la de un manto blanco tras la nevada. Y quienes subieron, a pesar de las recomendaciones del Cabildo para no hacerlo ante las malas condiciones meteorológicas, lo hicieron con ganas porque la situación no era sencilla: para ver la nieve tuvieron que recorrer a pie casi dos kilómetros y medio en pendiente como consecuencia del cierre de carreteras por heladas, y además bajo el frío y la lluvia.
La cumbre amaneció ayer heladas tras dos jornadas de nevadas, lo que obligó a que la máquina quitanieves del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria tuviera que actuar desde primeras horas de la mañana para despejar de hielo las vías y permitir el paso de los vehículos de la Guardia Civil, Protección Civil y los militares, además de facilitar el tránsito a pie de las personas que llegaban caminando hasta la zona y evitar así resbalones. Al cierre de esta edición, todavía continuaban cortadas las carreteras GC- 130 en el cruce de Las Mesas, y las GC-134 y 135 desde San Mateo para restringir el paso de vehículos. Con ello, la Guardia Civil pretendía evitar situaciones como la que se produjeron el viernes por la noche, cuando tuvo que desalojar más de 150 coches y 200 personas por las nevadas. Ayer apenas se registraron incidencias de gravedad, salvo el desprendimiento de una roca de grandes dimensiones en la carretera GC-320, a la altura de los Llanos de María Rivera, entre los municipios de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Brígida.
Durante toda la jornada se registró una notable afluencia de personas y a primera hora de la tarde el Cabildo advirtió del peligro de no dejarse coger por la noche ante la previsión de caída de las temperaturas. Pero mientras tanto, el día fuera largo, sobre todo para quienes optaron por despegarse de las sábanas incluso antes de escuchar cantar al gallo.
Fue el caso de Lionel y Tiago González Oporto, dos hermanos santaluceños de diez y seis años que ayer pusieron la alarma del despertador nada menos que a las 05:30 horas de la madrugada. No fue para menos porque era la primera vez que estos dos niños iban a ver la nieve. Sus padres, Marta y Raúl, enfilaron el coche hasta la Caldera de Los Marteles, donde a las 08.00 horas aparcaron e iniciaron un pateo de dos horas q ue los llevó hasta lo más alto de la isla.
Aunque llegaron forrados hasta las cejas, bien les mereció la pena. “Me encanta este paisaje tan blanco y espectacular, es muy chulo”, señaló Lionel casi tiritando del frío y poco después de mandarse el chocolate que su madre llevó en un termo. Los padres hicieron el sacrificio pos sus hijos. “Nos decían que era su sueño ver la nieve, así que vinimos por la ilusión que tenían”, dijo Marta, “merece la pena porque es algo único”.
Esta familia llegó caminando, pero otras personas prefirieron calentar un poco más el cuerpo y ascender hasta la cumbre corriendo e incluso en bicileta. Corriendo subieron Daniel Sosa, Ayose Lozano y Alexis Jiménez , pero a un ritmo menor al habitual en ellos. A estos tres amigos las inclemencias del tiempo no iban a frenarles en sus entrenamiento de cara a las competiciones deportivas en las que participan. Salieron desde el municipio de Valsequillo y recorrieron 13 kilómetros. “Entrenamos todos los días y ahora no iba a ser menos, aunque hace bastante frío”, explicó Daniel, mientras intentaba recobrar el aliento para tomarse un chocolate. “En estas circunstancias, el entrenamiento es más complicado y hay que tomárselo con más calma, ya que las condiciones en que se encuentra el suelo evita que vayamos a la misma velocidad de siempre”, dijo, “pero había que venir, no todos los días podemos disfrutar de este manto blanco”.
De esa misma estampa gozaron también Abel de la Nuez y Cristina Verona, una pareja de jóvenes teldenses que aprovechó el día libre para acercarse a ver la nieve. En su caso, dejaron el coche en Camaretas, en el municipio de San Mateo, y subieron andando en un trayecto que duró una hora y media. “Hace mucho frío, pero estonos sabe a gloria; la verdad es que esperábamos ver un poco más de nieve, pero así ya está muy bonito el paisaje”, relató Abel, quien tenía las manos tan heladas que le fue casi imposible manejar el teléfono móvil para tomar unas fotografías y menos aún para hacer un muñeco de nieve. Así que aprovechó uno que alguien dejó hecho minutos atrás para sacarse él su foto. Pero nadie se enterará, es un secreto entre él y Cristina.
Seguridad ciudadana
Como todos ellos, fueron muchas las personas que ayer subieron a la Cumbre “para curiosear”, como hicieron Miguely María José, vecinos de Las Palmas de Gran Canaria, porque hacía muchos años que no veían esta estampa. O como Pino y Armando, también de la capital, aficionados al senderismo que optaron por subir porque a él siempre le coinciden las nevadas con el trabajo y ayer no. “Siemprees un espectáculo ver esta imagen, y así además rompemos la rutina”.
El camino para llegar hasta la nieve era largo y costoso por la climatología, pero a nadie le importó: daba igual si había que subir cargando con paraguas, con mantas e incluso con carritos de bebé, pero había que conseguirlo. Otros incluso perdieron a Rocky durante esta visita, un perro q ue la Guardia Civil encontró y cuidó hasta que apareció su dueño unas horas después y la historia tuvo un final feliz.
Para evitar que la población subiera a la Cumbre, el Cabildo lanzó un vídeo en el cual el Jefe de Emergencias, Federico Grillo, explicó las dificultades de la situación. “El deber de la Administración es velar por la seguridad de los ciudadanos cuando las condiciones no son buenas, realizando cortes de carreterasy solicitando que no suban”, señaló, “uno de los problemas que tiene la Cumbre es que hay mucha gente en la isla y poco espacio arriba y si queremos subir todos es complicado solucionar problemas de seguridad ciudadana”. Grillo resaltó que la intención del Cabildo es que la población pueda moverse libremente, “pero en los momentos en los q ue el riesgo es demasiado alto hay que aplicar medidas restrictivas”.
Medidas que se mantuvieron ayer con el corte dec arreteras. Durante toda la jornada se registraron heladas en las carreterasy precipitaciones en forma de lluvia en la zona alta de la isla, pero con acumulaciones muy alejadas de las que se registraron el día anterior, cuyamáxima fue de 39,8 litros en Teror.
Este sábado fue el municipio de Tejeda el que recibió la mayor cantidad de agua con 14,3 litros por metro cuadrado, seguido por la estación de la Cruz de Tejeda, que registró 12,8 litros, y por la localidad de Teror, con 12,6 litros por metro cuadrado. La mayor acumulación de precipitaciones de ayer en Canarias tuvo lugar en el Roque de Los Muchachos, en la isla de La Palma.
En cuanto a las temperaturas, la San Mateo registró casi los cero grados durante la madrugada, concretamente los 0,1 grados a las 03:50 horas.. En la Cruz de Tejeda, por su parte, el mercurio subió ligeramente hasta los 1,9 grados a las 01.00 horas. La temperatura más baja de Canarias se registró en Izaña, en Tenerife, con -4,4 grados. Las máximas, por contra, las disfrutaron en La Aldea, donde al filo de las 17.00 horas el termómetro alcanzólos 21,2 grados, y en Maspalomas, en la localidad de San Bartolomé de Tirajana, donde se registraron 21,2 grados en las horas centrales del día.
En relación al viento, la mayor racha, de 75 kilómetros por hora alcanzó Tunte, y la segunda más fuerte, de 68 kilómetros por hora ,el barrio de San Cristóbal en Las Palmas de Gran Canaria.
Para hoy la Aemet prevé cielos nubosos en el norte de las islas y probables lluvias débiles dispersas durante las primeras horas. Las temperaturas irán en ligero ascenso, más acusado en las máximas de zonas de interior del norte. El viento soplará del noroeste.
