El Ayuntamiento de Ingenio dio ayer uno de los primeros pasos para llevar a cabo la rehabilitación y mejora de las viviendas sociales de La Bagacera, con 54 casas sitas en el casco de Ingenio, junto al antiguo Casino, y las de El Toril, que son 56 y que se encuentran en Carrizal, cerca del molino. Los dos núcleos se construyeron aproximadamente hace medio siglo en la villa de Ingenio. Para dichas iniciativas el Cabildo de Gran Canaria se ha mostrado con la voluntad de participar en estos dos nuevos casos si fuera necesario.

La alcaldesa de Ingenio, Ana Hernández, y la concejala de Vivienda, Pilar Arbelo, visitaron ayer con la consejera de Vivienda del Cabildo, Concepción Monzón, y con técnicos de las dos administraciones, La Bagacera y El Toril. “Con el propósito de hacer una valoración exterior del estado de los edificios”, afirmó la alcaldesa, que agregó que “en un principio parece que tienen menos daños que las viviendas de El Sequero. Sin embargo, habrá que comprobar cómo están las estructuras y los problemas de humedades. En cuanto podamos nos reuniremos con los propietarios e inquilinos para conocer cómo se encuentra el interior de estas viviendas”.

La consejera afirmó que “la intención es ser proactivos. Tenemos ya los proyectos de rehabilitación, metidos en los presupuestos de 2021, de las viviendas sociales de El Sequero [900.000 euros] y el de un antiguo colegio unitario [también en El Sequero]”.