El comité ejecutivo de la Mancomunidad de Municipios del Sureste se reunió ayer para seguir con el trabajo de elaboración de un listado de necesidades en la comarca, para luego redactar proyectos y buscar financiación por parte del Gobierno de Canarias, y que provienen de Europa.
En ese listado de necesidades, figuran, las ampliaciones de la desaladora y depuradora del Sureste respectivamente, que puede suponer una inversión de casi 14 millones de euros. También se planteó la colocación de placas fotovoltaicas en las estaciones de agua salada y depurada, como en las de Cruce de Arinaga.
Para esas grandes obras, los tres alcaldes -Óscar Hernández, de Agüimes y actual presidente de la Mancomunidad; Ana Hernández, de Ingenio; y Santiago Rodríguez, de Santa Lucía de Tirajana- optaron la reciente decisión de invertir los 16 millones de euros que proceden de la remanente.
En esta reunión de los tres regidores, se planteó la necesidad de sustituir los colectores de las aguas residuales, ya que están “muy deteriorados” ya que se colocaron en torno a 1992. También la sustitución de la red principal de agua, hasta los respectivos depósitos, para que el diámetro de las tuberías sea mayor y así ganar mayor capacidad de distribución del agua.
Por otro lado, el comité ejecutivo cerró ayer las cuentas del ejercicio 2020, con un déficit de 900.000 euros. El presidente de la Mancomunidad, Óscar Hernández, explicó que “no se trata de un déficit estructural, sino contable, por el retraso de unos pagos que se harán este ejercicio”. “No tenemos déficit estructural ya que tenemos una remanente de 16 millones de euros”, reiteró.
Asimismo, se aprobó en el encuentro de ayer crear una propuesta con el Cabildo de Gran Canaria para homologar y dotar material a aulas de formación a desempleados con una inversión de 280.000 euros.
